GINEBRA.- Durante el año 2023, el el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) contabilizó que más de más de 319.000 cubanos solicitaron asilo en disferentes países, tras la huir del régimen totalitario de Miguel Díaz-Canel.
ACNUR informó que los migrantes cubanos solicitaron el asilo principalmente en 49 países a lo largo del año pasado, sobre todo en el continente americano, entre otros factores por la cercanía geográfica y la similitud a nivel cultural.
241.553 migrantes optaron por Estados Unidos como el país para el cual solicitar asilo. México fue el segundo destino solicitado por los cubanos, con 24.957 peticiones de refugio. Otros migrantes eligieron el camino irregular hacia Honduras como puente para llegar a Estados Unidos, reseña CubaNet.
Los datos oficiales indican que la cantidad de migrantes cubanos en tránsito se disparó en 2023 hasta alcanzar el nivel más alto de la historia. Esta cifra refleja una tendencia creciente que comenzó luego de que el régimen de Daniel Ortega eliminara el requisito del visado para entrar a Nicaragua.
Cubanos llegan a Europa
Además, más de 40.000 solicitaron refugio en Uruguay, Brasil, Costa Rica, Perú, Surinam, Trinidad y Tobago, Panamá, Argentina, Paraguay, Chile, Colombia, Ecuador y República Dominicana.
La Unión Europea fue la tercera región con mayor número de solicitudes de asilo. Un total de 5.631 cubanos pidieron asilo en países como España, Italia, Alemania, Francia y Grecia.
Desde marzo de 2022, la crisis económica que azota a Cuba persiste sin dar muestras de alivio, señaló el análisis realizado por la Organización de Derechos Humanos de las Américas (WOLA). De acuerdo al reporte de WOLA publicado a finales de 2023, esta crisis ha llevado a casi medio millón de cubanos a abandonar el país en busca de nuevas oportunidades.
WOLA señaló que la crisis actual en Cuba se atribuye en parte a las consecuencias de la pandemia del COVID-19, que reveló los problemas estructurales persistentes de la Isla; así como a cortes eléctricos, escasez de alimentos, combustible y medicinas, que han afectado gravemente los servicios públicos en Cuba, contribuyendo al aumento de la desigualdad y la frustración con el sistema político cubano. Estos factores hacen que la vida en Cuba sea insostenible para muchos.
FUENTE: REDACCIÓN/CubaNet