sábado 23  de  marzo 2024
OPINIÓN

Elián González y el sucio juego de la política

La historia de aquel niño que fue encontrado atado a un neumático en medio del mar, el Día de Acción de Gracias de 1999, dio mucho de qué hablar
Por ANIA LISTE

MIAMI.- El caso de Elián González es recordado como un hito en la confrontación entre el dictador Fidel Castro y el exilio cubano de Miami. La historia del niño balsero que fue encontrado a la deriva por dos primos que pescaban fue recuperada en la noche de este jueves por CNN con la emisión del documental "Elián", de los directores Tim Golden y Ross McDonnell.

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Poster del documental emitido por <i> CNN</i>.
Poster del documental emitido por CNN.

En aquella época, muchas familias huían de Cuba en balsas y llevando niños. Muchas nunca llegaron, probablemente devoradas por tiburones en el estrecho de la Florida. Sus sufrimientos quedaron en el anonimato. Pero la historia de aquel niño que fue encontrado atado a un neumático en medio del mar, el Día de Acción de Gracias de 1999, dio mucho de qué hablar.

Había emprendido la incierta travesía solo con su madre, Elizabeth Brotons, quien murió en el intento de ofrecer a su hijo otra vida. Su padre, Juan Miguel González, había quedado en la isla.

Si hay algún momento del documental en que Elián, ya con 23 años, deja de parecer un robot y tiene atisbos de humanidad, es cuando asevera: "Sobreviví gracias a mi madre".

El padre de Elián

El principal responsable de los siete meses de litigio vividos por el balserito Elián, un niño de 6 años, fue su padre. Más allá del derecho que tenía a recuperar a su hijo, escogió el peor aliado: Fidel Castro. Fue entonces cuando Juan Miguel González dio la oportunidad al dictador cubano de armar otro circo, en el que su hijo era solo un payaso más.

La isla entera fue movilizada por Fidel Castro para "recuperar a Elián". Desde los centros de trabajo te obligaban a marchar y vociferar pidiendo que el niño volviera. En la otra orilla, en Miami, congresistas y políticos parecían moscones alrededor de un niño cuya mirada revelaba desamparo, tristeza e indefensión. La Fundación Nacional Cubano Americana también actuaba en este circo. El caso de Elián González hasta se coló en los debates presidenciales de campaña.

Los adultos que han quedado horas vagando en el mar, a la deriva, hasta ser rescatados, cuentan que les he costado sobreponerse a la experiencia. ¿Qué estaba sintiendo entonces un niño que quedó solo en un neumático y perdió a su madre? Mas nada parecía importar a Fidel Castro ni a la politiquería de Miami y Washington. A cualquier precio, había que sacar réditos políticos de la historia del niño.

Elián González hoy

En el documental transmitido la noche de este jueves por CNN, se escucha decir al joven Elián, que tiene hoy 23 años: "Yo no profeso ninguna religión, pero, de hacerlo, por supuesto que mi religión sería Fidel". En otro momento afirma que si se hubiese quedado en Miami y no hubiese vuelto con su padre Juan Miguel González, "habría sido la imagen insignia de ese grupo de cubanos que trata de destruir la revolución (...) Me hubiesen utilizado para eso".

Al escucharlo no sé si sentí pena o desolación. Es la imagen de un adoctrinamiento impecable. Es el símbolo de una isla demolida, de una nación derribada, del estropicio que han hecho los Castro con las ilusiones de la gente.

El padre de Elián creyó, o prefirió creer por conveniencia y comodidad, que el enemigo era la familia de Miami. Entregó su alma y la vida de su hijo al Diablo. Allá él con su condena.

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