La CIDH ha solicitado protección para Bernardo Arévalo, presidente electo de Guatemala, su fórmula y el partido Movimiento Semilla
AP/Moisés Castillo
CIUDAD DE GUATEMALA.- La formación política Movimiento Semilla, liderada por el presidente electo de Guatemala, Bernardo Arévalo, se encuentra inmersa en una investigación que inició el Ministerio Público en su contra, por presuntas actividades financieras ilícitas.
La Fiscalía Especial contra la Impunidad, encabezada por Rafael Curruchiche, expresó preocupación en relación con los fondos utilizados para el financiamiento del partido. Según fuentes internas de la fiscalía, existe la sospecha de que se haya incurrido en lavado de dinero u otros activos, ya que se afirma que el partido pagó una cantidad significativa para recolectar las firmas necesarias para su constitución.
Esta investigación se produce en medio de la polémica, ya que Curruchiche también solicitó la suspensión provisional de la inscripción de Movimiento Semilla como persona jurídica. El juzgado séptimo penal emitió una orden similar en julio, pero el partido sostiene que el Tribunal Supremo de Justicia anuló posteriormente esta orden, lo que genera confusión y debate legal.
Entre tanto, Arévalo enfrenta las alegaciones con calma y afirmó que su partido está cooperando plenamente con las autoridades para aclarar cualquier duda. También reiteró su compromiso con la transparencia y la rendición de cuentas en todas las actividades financieras y políticas del partido.
Analistas políticos destacan que estas acusaciones y la investigación en curso podrían tener un impacto significativo en la percepción pública del partido y su líder. Con el enfoque en las cuestiones financieras en lugar de las disputas políticas habituales, el panorama político guatemalteco podría experimentar un cambio en la dinámica de la discusión.
En última instancia, la investigación en curso arrojará luz sobre la validez de las alegaciones y sobre si Movimiento Semilla podrá mantener su estatus como partido político registrado. La intersección entre la política y las finanzas en este caso está generando un debate nacional sobre la integridad de los procesos democráticos y la necesidad de una mayor supervisión de las actividades financieras de los partidos políticos.
FUENTE: Con información de AFP
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