OEA: "Huelguistas cubanos son víctimas de terrorismo de Estado"

Almagro, quien participó en una conferencia promovida por la plataforma Cuba Decide, afirmó que la “dictadura” está mostrando “su verdadera cara, la que reprime, la que oprime”, al tiempo que llamó a tomar “acciones concretas” en esa nación insular.

“Es hora de que la democracia retorne a Cuba, y sus ciudadanos puedan decir lo que piensan sin temor a ser perseguidos y encarcelados”, puntualizó el titular de la OEA.

Por su parte, José Daniel Ferrer, líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), quien es uno de los huelguistas, precisó que 55 de las personas en ayuno se encuentran en la isla y ocho en el extranjero. Ferrer aseguró que eran 64 y “una suspendió la huelga” porque “ya se sentía muy mal por una baja en la presión arterial”.

El activista explicó que algunas de las personas participantes en la huelga presentan “dolores estomacales, dolores de cabeza, algunos dolores en las articulaciones y nauseas”.

Dijo que “el régimen castrocomunista no nos deja otra opción que recurrir a este método”, tras 12 días de cerco policial a la sede de UNPACU, en el sector de Altamira, en Santiago de Cuba, “porque se oponen a que demos alimento y medicinas a muchas personas necesitadas en la comunidad”.

Ferrer comentó que mientras “Díaz-Canel [gobernante de Cuba] está de fiesta”, por el 62 aniversario de la Seguridad del Estado, “nosotros conmemoramos 24 años desde que policía política abrió fuego contra mi hermano Enrique Ferrer García” y otras personas que realizaban labores de pesca.

Según Ferrer, “ese día decidimos que no haríamos otra cosa que luchar de manera no violenta para que los cubanos no solo tuvieran alimento, sino todos sus derechos”. Antes, dijo, “estábamos en la clandestinidad”.

Asimismo, el líder de la UNPACU aseguró que durante el cerco a la sede de esa organización han sido golpeados cuatro menores. “Una niña fue tirada al piso, le aprisionaron el cuello y pasó todo un día sin comer porque no la dejaron entrar a nuestra sede para que recibiera alimentación”, apuntilló.

Entretanto, Rosa María Payá, directora ejecutiva de la Fundación para la Democracia y coordinadora de Cuba Decide, demandó solidaridad internacional y advirtió que “lo que pasa en Cuba debe ser contado”.

“Son personas que solo les queda su cuerpo para protestar contra el régimen”, dijo Payá, en remembranza del pensamiento de su padre, el activista Oswaldo Payá, quien según su familia y ciertas organizaciones internacionales murió a raíz de un accidente de tránsito provocado por el régimen.

“Hemos enviado un reporte a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y también a algunos relatores de Naciones Unidas” para denunciar el cerco en contra de activistas en Cuba, dijo Payá.

De igual forma, la opositora hizo un llamado a estamentos multinacionales como la Unión Europea y Naciones Unidas, y a gobiernos democráticos del mundo para “tomar acciones” a favor de los huelguistas que “están en riesgo de perder la vida”.

Katherine Mojena, disidente cubana radicada en Miami, que lleva dos días en huelga, sostuvo que el ayuno, “más que una estrategia, es un estado de sentimiento y no puede ser criticado”.

Alertó que entre las personas que suspendieron la ingesta de alimentos “hay algunas con patologías dentro de Cuba, que pueden complicar su salud”.

El coordinador del Movimiento San Isidro (MSI), Luis Manuel Otero Alcántara, envió un video a la conferencia en el que expresó manifestó su solidaridad con los activistas en huelga de hambre.

Otero Alcántara observó que “ya las autoridades cubanas saben las consecuencias de entrar a la fuerza en la vivienda de un cubano que ejerce su derecho a protestar pacíficamente”, en alusión al asaltó violento que ejerció el régimen en noviembre pasado en la sede del MSI.

Ramón Saúl Sánchez, director del Movimiento Democracia, resaltó que “el cubano está muriendo de una cosa peor que la muerte física, y es por la desesperanza, por un régimen que solo le da tristeza”.

Sánchez enfatizó que la huelga de hambre es un caso de “grave urgencia” dado que, según su experiencia, “una persona puede fallecer repentinamente por un fallo renal, infarto o deshidratación cuando el cuerpo no está acostumbrado a no recibir alimento”.

Para el opositor que ha realizado varias huelgas de hambre desde el exilio en Miami, “Díaz-Canel está repitiendo el error cometido en San Isidro”, y agregó: “Despertaste a los artistas, despertaste los jóvenes; estás cavando tu propia tumba con la opresión”.

En la reunión en línea también participaron el pastor Mario Félix Lleonart, del Instituto Patmos; Carlos Guerra, director general del Centro de Acción y Defensa por los Derechos Humanos, y otras personas que se declararon preocupados por la situación de Cuba, quienes intervinieron desde diferentes partes del mundo.