Un nuevo proceso de regularización migratoria decretado por el Gobierno de Panamá le dará un estatus legal a extranjeros que posiblemente trabajen en condiciones de "trata", para romper ciclos de explotación, informó este domingo una fuente oficial.
La medida recientemente anunciada busca traer a la legalidad a personas indocumentadas o en condición irregular, identificarlas por motivos de seguridad y conocer la dimensión de la migración ilegal en el país, explicó el director del Servicio Nacional de Migración (SNM), el comisionado Javier Carrillo.
Los Decretos Ejecutivos 167 y 168 que contemplan esta opción, colocarán a los beneficiados en un plano legal, para que comiencen a aportar formalmente al Estado, y ayudarán a reconocer la presencia de requeridos por la Justicia internacional, añadió Carrillo en declaraciones al canal local TVN.
Ambos procesos, uno exclusivamente para los chinos y otro para el resto de nacionalidades, exige a los migrantes haber entrado al país antes de enero de este año, en el primer caso, o, en el segundo, haber cumplido el año en el país el pasado 3 de junio, fecha de promulgación de los decretos.
La representante del Colegio Nacional de Abogados (CNA) Irma Araúz consideró en TVN que las medidas favorecen la ilegalidad, llaman a una migración desordenada y repiten los errores del pasado Gobierno (2009-2014) con las ya suspendidas ferias del "Crisol de Razas", que dieron estatus legal a más de 50.000 personas sin considerar sus oficios.
El CNA cree que la metodología de las regularizaciones periódicas favorece el tráfico de seres humanos, porque otorga estatus legal a personas que pueden estar indocumentadas.
Un representante de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), Gonzalo Medina, expuso que ante el movimiento constante de personas en todo el mundo, son positivas las medidas para facilitar y regular los flujos migratorios.
Aseguró que la legalización contribuye a prevenir la trata, porque le da a las víctimas la posibilidad de exigir sus derechos.
Recordó que más del 60% de las personas que acudieron a las ferias de "Crisol de Razas" fueron mujeres, de las cuales muchas, por necesidad e ignorancia, trabajaban bajo condiciones de explotación fomentadas por su estatus migratorio irregular, de acuerdo con un estudio de la OIM citado por Medina en TVN.
El gremio de los juristas aboga por una política migratoria planificada con base a la demanda profesional que tiene Panamá, de modo que los extranjeros no puedan competir con los nacionales en los sectores para los que ya están preparados.
Araúz sostuvo que debido a las carencias de la última década, los foráneos ocupan plazas de trabajo que los nacionales necesitan, sobre todo en el área de servicios, y colman prestaciones públicas, como la salud, en detrimento de los panameños.
Además, sobre los decretos, la abogada dijo que es una estrategia del Gobierno central para recaudar fondos, ya que los pagos que deberán hacer los nuevos solicitantes irán en un 80 % a la Presidencia.
El director de Migración descartó esa motivación, y dijo que los trámites cuestan 500 dólares para la mayoría de las nacionalidades, que es la mitad de los impuestos que se paga por otro tipo de visas.
"Si fuera porque estamos desesperados, fuéramos a los comercios, agarramos a los extranjeros que trabajan y multáramos con 1.000 dólares a cada uno y 1.000 dólares al dueño, y se recauda mucho más", ironizó.
Carrillo recordó que a diferencia de todos los otros trámites migratorios que existen en Panamá, este va a poder ser negado al solicitante, que después de presentar los requisitos (entre ellos los antecedentes penales de su país), deberá someterse a una entrevista en el SNM.
Y, dijo el director, Panamá tendrá la potestad de regular cada año cuántas personas está dispuesto a aceptar, y cerrar las puertas según sea la "situación económica".
Para garantizar una migración ordenada y regular, la OIM trabaja con Panamá en el levantamiento de un perfil migratorio de quiénes ingresan, basado en evidencias y hechos, el cual podrá ser presentado a fines de este año para la formulación de una política migratoria ideal, anunció Medina.
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