
Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa, Nicaragua, dijo que permanecerá dentro de la curia junto a seis sacerdotes y laicos hasta que lo dejen salir
"He querido salir a la catedral a hacer la santa misa, pero obviamente las autoridades superiores no han dado permiso, nos encontramos aquí (...) encerrados en la curia episcopal", denunció el obispo, en un video publicado por el independiente Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) en Twitter.
Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa y crítico del régimen de Daniel Ortega, dijo que permanecerá dentro de la curia junto a seis sacerdotes y laicos hasta que lo dejen salir.
La policía rodeó la casa cural de Matagalpa, en el norte de Nicaragua.
Álvarez, que integra la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), quedó acorralado en la curia, adonde había llegado más temprano a pesar del intento de la policía por bloquearle el paso.
La policía no debería realizar "estos acosos, estos hostigamientos", protestó el obispo, quien durante una improvisada misa que transmitió por las redes sociales, exigió al régimen de Ortega respetar la "libertad" religiosa.
Deben "permitirnos celebrar nuestra fe en libertad, nuestra libertad de expresión, porque no le hacemos mal a nadie", dijo.
"Creo que orar no es ningún delito, (y) si orar es un delito, creo que seguiremos orando para que se fortalezca nuestro clero y nuestros sacerdotes", dijo a la AFP la feligresa matagalpina María Ruiz.
La Iglesia católica nicaragüense realiza "una jornada de oración por la santificación y protección de los sacerdotes" que han sido fuertemente criticados por el régimen de Ortega desde las protestas opositoras de 2018.
Varios templos dieron refugio a manifestantes que resultaron heridos o huían de la represión a las protestas de 2018, que dejaron 355 muertos, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Según el dictador, los templos fueron usados como "cuarteles" por los manifestantes.
El lunes, Álvarez denunció el cierre de cinco radios de su Diócesis en Matagalpa, por parte de las autoridades de la dictadura de Ortega, por supuestas ilegalidades que él rechaza.
La clausura de estos medios se suma al cierre, en junio pasado, del canal de la Conferencia Episcopal, así como de TV Merced de la Diócesis de Matagalpa y el canal católico San José de Estelí (norte).
Este jueves, la Unión Europea (UE) condenó el cierre "arbitrario" de las emisoras católicas nicaragüenses y el uso de la violencia para intimidar a los opositores al régimen.
"Esto constituye una nueva violación de la libertad de expresión y de la libertad de religión o creencia", denunció en un comunicado Peter Stano, portavoz del jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell.
Cierran los medios porque así "lo quiere la pareja dictatorial", criticó en Twitter el padre Vicente Martínez, de ciudad Darío, un municipio de Matagalpa, en alusión a Ortega y su esposa, Rosario Murillo.
"Todavía quedan algunos personajes que son bufonescos, que hacen el ridículo, sin estatura moral alguna", condenó por su parte este jueves Murillo, en medios oficialistas.
En marzo pasado, el Vaticano informó que el régimen de Nicaragua retiró a su nuncio en Managua desde 2018, Waldemar Sommer, el beneplácito para permanecer en el país.
En tanto, las religiosas de las Asociación Misioneras de la Caridad, de la orden de Santa Teresa de Calcuta (1910-1997), abandonaron en julio Nicaragua, luego de que el régimen ilegalizó sus operaciones.