Ni bien uno se descuida, ya es tarde y el perro ha dejado su huella en casa en forma de charquito. En ese momento es fundamental que el dueño de casa reaccione rápido y que no utilice ningún producto con amoníaco
pipi.jpg
Enfócate en educarlo sin pegarle, gritarle o frotarlo contra su pipí.
CORTESÍA
¿Por qué? Porque el amoníaco hace que el perro poco después vuelva al mismo lugar.
Por eso lo que se recomienda es pasar un trapo y luego rociar el lugar con una solución de vinagre, que se prepara mezclando un tercio de vinagre con dos tercios de agua. Después de eso, se vuelve a pasar un trapo seco y, si lo necesita, repite el procedimiento una vez.
FUENTE: dpa