MIAMI.- Las autoridades tailandesas han finalizado la investigación sobre el crimen del cirujano colombiano de 44 años Edwin Arrieta, quien fue asesinado por el cocinero Daniel Sancho, hijo del actor español Rodolfo Sancho, y realizó una rueda de prensa para dar detalles sobre el proceso que ahora sigue.
Desde la comisaría de Koh Phangan, Surachate Hakparn, subdirector de la policía de Tailandia, informó que la conclusión del caso es que la muerte del ciudadano colombiano no fue un accidente, y que en efecto Sancho fue el autor del crimen premeditado, pues adquirió las herramientas que necesitaba para asesinarlo y posteriormente descuartizarlo, reseñó la revista ¡HOLA!.
No obstante, las autoridades aún desconocen el motivo concreto de la muerte de Edwin Arrieta, pues si bien el colombiano presentaba una puñalada en la parte derecha de su pecho, que coincide con la declaración de Sancho y con la camisa que llevaba el hombre ese día la cual fue hallada durante la investigación; el cirujano también presentó un golpe en la parte posterior de su cabeza.
El arma homicida tampoco ha sido hallada.
La policía recalcó que Daniel actuó solo, pues no se halló evidencia en las cámaras de seguridad de que otra persona lo haya acompañado, así como tampoco se encontraron rastros de ADN. “No puede haber otro implicado porque no hemos encontrado imágenes en las cámaras de seguridad ni restos de ADN de otras personas”.
Ante esto, se confirma que Daniel Sancho enfrenta ahora el posible veredicto de la pena de muerte. Sin embargo, se debe esperar a que el fiscal que lleva el caso evalúe los hechos y proceda a establecer la condena y sentenciar al español de 29 años.
Hasta los momentos, las autoridades mantienen que el móvil de este asesinato fue que Daniel Sancho quería acabar con la relación que tenía con Edwin Arrieta, pero que aparentemente el ciudadano colombiano se negaba. Igualmente, la policía insistió en que el celular de la víctima no ha aparecido, por lo que no se puede constatar la declaración de Sancho en la que aseguraba que el cirujano lo había estado amenazando a través de mensajes.
FUENTE: REDACCIÓN