
Un grupo de artistas demandó a Bad Bunny y a la empresa Rimas Entertainment y Carritos LLC por utilizar la imagen de un mural en el videoclip de "Ser bichote"
"La demanda radicada en la Corte federal para el Distrito de Puerto Rico plantea que los artistas Pedro E. Torres Román, Mario Resende González y Antonio Moll realizaron el mural como parte de un proyecto para revitalizar edificios y espacios abandonados en Santurce. En 2014, los demandantes, para ese entonces residentes de Santurce, decidieron restaurar visualmente la cancha de baloncesto próxima a la Placita de Santurce", reseñó el diario Metro Puerto Rico.
Según el diario local, los artistas del mural aseguraron que no fueron contactados por Bad Bunny o la empresa musical para el uso de dicho mural en el videoclip.
"Los demandantes aseguran que a pesar de los recursos económicos vastos de los demandados y su conocimiento sobre ley de derechos de autor, y de que Bad Bunny es un artista que a su vez depende de su talento creativo para ganarse la vida, ninguno de ellos ha reconocido haber actuado mal ni han compensado a los autores del mural por el uso comercial fraudulento e ilegal de su obra Buenos días Canals”, publicó el periódico.
"El video de Ser bichote presenta el mural de los artistas demandantes como pieza central, punto focal y único elemento creativo. La obra de arte de los artistas demandantes se muestra en la totalidad del video, que tiene una duración de 3 minutos y 13 segundos. El atractivo estético del mural de los artistas demandantes es la razón por la cual los demandados eligieron esa cancha de baloncesto de Santurce específica para la filmación del video. El video Ser bichote tuvo 9,2 millones de visualizaciones en YouTube en menos de 3 meses y alcanzó 15.422.615 millones de visualizaciones en menos de 10 meses”, indica parte de la demanda, de acuerdo con información reseñada en Metro Puerto Rico.
Ante lo ocurrido, los artistas exigen un juicio por jurado y compensación por los daños reales de los demandados y las ganancias obtenidas como resultado de la conducta infractora, incluidas, entre otras, todas las ganancias de las ventas y otra explotación del trabajo protegido por derechos de autor.
"Si el tribunal acoge la petición de los demandados, se establecerán precedentes en toda la nación que le quitarán a los artistas visuales el derecho a decidir quiénes y cómo utilizan su obra y de recibir compensación por dicho uso comercial", declaró un portavoz de Pedro E. Torres Román, Mario Resende González y Antonio Moll.