MIAMI.- JESÚS HERNÁNDEZ
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El reconocido actor venezolano Héctor Manrique se mete en la piel de un siquiatra delirante y asume su alegato en el unipersonal Sangre en el diván que presenta en el teatro Trail estos días.
“El texto está basado en el capítulo El delirio del libro Sangre en el diván, de la periodista Ibéyise Pacheco, donde refleja la entrevista que sostuvo con el siquiatra Edmundo Chirinos, sentenciado por el asesinato de la estudiante de periodismo Roxana Vargas”, anticipó el actor a DIARIO LAS AMÉRICAS, que además dirige y produce el montaje que estrena hoy en Miami.
Manrique dejó a un lado las preguntas de la periodista y reorganizó las respuestas del médico “sin cambiar una palabra” para reflejar el carácter dominante del personaje y subrayar el efecto interpretativo de la pieza.
“Recuerdo que Ibéyise, la autora del libro investigativo, comentó que la alocución de Chirinos fue muy fluida. Que sus preguntas sobraban porque él hablaba prácticamente sin parar, mientras trataba de justificar sus acciones para tratar de demostrar la inocencia”, resaltó.
De esta manera, Manrique editó el largo texto, donde el personaje reiteraba sus posiciones para justificar sus acciones, hasta lograr la pieza que conocemos hoy.
“Recuerdo la primera vez que leí el capítulo El delirio y cuánto me impresionó la personalidad de este hombre que pude conocer en persona. En este texto él demuestra que es un ególatra. Cómo habla de todo lo que le rodea, la gente y el país, en función de una veneración que siente por sí mismo”, subrayó.
Antecedentes
De hecho, Edmundo Chirinos fue una figura pública muy importante en Venezuela. Además de haber sido uno de los siquiatras más prestigiosos del país, fue rector de la Universidad Central, diputado constituyente, candidato a la presidencia y médico de tres presidentes, incluyendo a Hugo Chávez.
“Entonces, saltó el escándalo del asesinato de la joven estudiante. Lo acusaron del hecho. La policía halló en su casa más de mil fotografías y videos de mujeres desnudas o en ropa interior, muchas de ellas pacientes, que estaban sedadas o dormidas en el consultorio. Durante el juicio, se mencionaron varios casos de mujeres que habrían sido violadas por Chirinos luego de ser sedadas durante la consulta”, detalló.
Con 75 años de edad, Chirino fue sentenciado a 20 de cárcel por homicidio en 2010. Unos meses después sufrió un derrame cerebral o apoplejía que lo confinó a una silla de ruedas.
Dos años después del encarcelamiento, el condenado fue beneficiado con “la medida cautelar de casa por cárcel” por su avanzada edad. Falleció un año después.
“Yo no uso mis palabras. Todas las palabras que se plantean en este monólogo fueron pronunciadas por Chirino. Ahí, entre esas justificaciones y el caso de la joven asesinada, saltan las verdades que lo inculpan”, concluyó.
Funciones jueves y viernes 8:30 p.m., sábado 10:30 p.m. Teatro Trail, 3715 SW 8 Street, Coral Gables. Tel. 305 443 1009. Consulte el portal TeatroTrail.com en internet.