MIAMI.-LUIS LEONEL LEÓN
@luisleonelleon
El músico cubano, residente en Miami, autor de Divino Guión, Corazón Boomerang o Ahora sí tengo la llave, entre otros éxitos de la banda cubana Habana Abierta, ofrecerá un concierto este sábado a las 11:30 pm, en el CubaOcho Museum and Performing Art Center en La Pequeña Habana
MIAMI.-LUIS LEONEL LEÓN
@luisleonelleon
Vanito Brown siente una especie de nostalgia feliz cuando recuerda sus primeros tiempos, guitarra en mano y mochila al hombro, con pinta y anhelos de trovador postmoderno, cantando entre amigos, en peñas underground y esquinas de la utópica Habana de los años 80. Desde entonces, su vida y sus canciones han dado muchas vueltas, entre pérdidas y hallazgos, desencantos y añoranzas, adioses y retornos.
El músico cubano, residente en Miami, autor de Divino Guión, Corazón Boomerang o Ahora sí tengo la llave, entre otros éxitos de la banda cubana Habana Abierta, ofrecerá un concierto este sábado, 2 de Abril a las 11:30 p.m., en el CubaOcho Museum and Performing Art Center en La Pequeña Habana. Un buen pretexto para conversar con DIARIO LAS AMÉRICAS.
Lucha Almada: un par de décadas atrás
“En los 80 y los 90 tenía muchas ganas de ver mundo, había mucho arte, música y literatura a mi alrededor, y las hormonas haciendo de las suyas. Fueron años de mucha creación”, recordó.
Lucha Almada es el nombre de la primera banda y del primer contrato discográfico y editorial de Alejandro Gutiérrez y Vanito, que por entonces se llamaba Ihosvany Caballero, su nombre de nacimiento.
“No me dio tiempo a escoger un nombre artístico. Lo firmé y grabé rebosante de inocencia e ingenuidad. Eran muy buenas canciones, sobre todo las de Alejandro que con su voz hermosa me ponía la parada bien alta. Ninguno de los músicos había estudiado más de un año el instrumento que les tocó ejecutar en el disco: Eduardo Kairús (guitarra eléctrica), Gerardo Díaz (batería), Ángel Pérez (bajo). Tampoco Alejandro Frómeta había producido jamás un disco de arriba a abajo. Darsi Fernández desde Bis Music, Artex, fue certera en apostar por aquella locura. Nadie se lo esperaba y funcionó. Quizás porque nos fuimos de Cuba al son del estribillo del single: ‘ya no vuelven más’ antes de que saliera el disco al mercado”.
La Habana Oculta
Un importante acontecimiento de esa época, del que no pudo formar parte, fue el proyecto Habana Oculta. Por primera un disco recogía a cantautores de los años 90: Luís Alberto Barbería, Pepe del Valle, Andy Villalón, Kelvis Ochoa, Boris Larramendi, José Luís Medina, Superávit, Carlos Santos. Los responsables y productores fueron Gema Corredera y Pavel Urquiza, que aún formaban el famoso dúo Gema y Pavel.
“Habana Oculta fue gracias a ellos, que se fueron de Cuba pero no olvidaron a sus colegas, ni renunciaron al propósito. Volvieron a los dos años con el dinero necesario y la discográfica en la mano, para grabar y dar a conocer el sonido y la actitud underground que encarnábamos. Yo no pude estar en Habana Oculta, cosa que me hubiera encantado, pero se proyectó y grabó simultáneamente al disco de Lucha Almada que estábamos haciendo. Fue oportuno y justo que el espacio que Alejandro y yo dejamos pudieran ocuparlo otros cantautores como Kelvis Ochoa, recién incorporado a la movida habanera desde Isla de Pinos (Isla de la Juventud)”, expresó.
Provenientes en su mayoría de la Peña de 13 y 8 (en el Vedado) donde también solía cantar Vanito, los jóvenes cantautores de la movida habanera llegaron a Madrid en 1996 a promover el álbum Habana Oculta. Un año más tarde, por un desacuerdo contractual y con varios cambios en la alineación, pasan a denominarse Habana Abierta y graban su primer disco homónimo.
“El trío Superávit abandonó el proyecto y Gema nos llamó a Alejandro y a mí para que viajáramos desde Quito a incorporarnos al supuesto segundo disco de Habana Oculta, esta vez para el sello BMG Ariola. Pero la discográfica anterior, Nube Negra, ostentaba, entre otros derechos, los del nombre. No hubo acuerdo entre compañías y adoptamos el nombre de Habana Abierta. Iba a tono con tratarse de un sello multinacional que nos ofrecía mayor exposición en el mercado, y también con la naturaleza del proyecto, abierto, inclusivo, heterogéneo. Para mi gusto el nuevo nombre tenía demasiadas vocales ‘a’, pero no fue lo importante”.
Habana Abierta: de La Habana a Madrid y viceversa
Su segunda producción, 24 horas, fue exitosa en España y a la vez se convirtió en un fenómeno musical underground en Cuba. A pesar de que la censura gubernamental vetó varias de sus canciones en la radio, muchos jóvenes las convirtieron en himnos de su tiempo. “Los discos se pasaban de mano en mano en La Habana, se hicieron miles de copias piratas, lo que llevó a que el público de Habana Abierta creciera mucho más allá de los que los habían conocido en los años de 13 y 8. Realmente fue una explosión”.
Desde diciembre del 2002 hasta enero del 2003, después de siete años fuera de Cuba, los músicos de la agrupación underground que más éxito internacional había tenido, Habana Abierta, regresan a Cuba a realizar conciertos individuales en teatros de La Habana, cantando para su público por primera vez desde la partida a España. Las presentaciones culminaron con un gran concierto en el Salón Rosado de La Tropical, un sitio hasta entonces mayormente reservado para la música salsa, donde asistieron unas 10,000 personas. Una muestra infalible del fenómeno musical y cultural en que se habían convertido.
“Fue lo máximo. Una fiesta enorme. El primer y el segundo disco habían pasado copiados de mano en mano gracias a amigos que iban y venían de España, como Luis Alberto García, Jorge ‘Pichy’ Perugorría, Carlos Varela, Darsi Fernandez, Pedro Jackson Copello, entre otros. Había muy fuertes deseos de vernos actuar en Cuba. Al cabo de siete años afuera sabíamos que desde ciertos círculos se nos consideraba “anticastristas”, algo formidable promocionalmente, y de verdad nos sorprendió la invitación del Instituto Cubano de la Música. Lo aceptamos con dos condiciones: que no se nos tocara ni una coma de las canciones y que corriera la institución con los costos de pasajes y producción. Nosotros no cobraríamos ni un centavo, ya era bastante bueno que sucedieran los conciertos. Durante cuatro días consecutivos repletamos la Sala Covarrubias del Teatro Nacional, la Casa de las Américas, el Teatro de Bellas Artes y como colofón el Salón Rosado de La Tropical, que hasta entonces era reservado exclusivamente para eventos de salsa y se abrió en lo adelante también al rock and roll y la canción urbana como la que hacemos nosotros”.
Vanito en La Pequeña Habana
Llegó a Miami por casualidad. Según cuenta: le volvió a suceder lo mismo que en 1995, cuando de La Habana se fue por cuatro meses a Ecuador, dejando el disco Lucha Almada por lanzar en Cuba.
“En 2014 fui a Cuba por cuatro meses a grabar Norte Sur Este y Aquel, con la misma discográfica de entonces, Bis Music. Estando allí se abre la posibilidad de venir con el grupo Interactivo a presentarnos en Miami. Solicité una visa de diez días y recibí, sin esperarla, una visa de intercambio cultural de seis meses y otra familiar de cinco años. Así que yendo y viniendo, junto a mi mujer y partner Arrate Cuartango, intentando regresar desde aquí a Madrid, pero comparando y sopesando circunstancias, ofertas, pros y contras, decidimos quedarnos en Miami, donde hasta hoy no hemos parado de hacer y proyectar cosas. Y la verdad es que a ella, como a mi, desde siempre nos encanta. Y otra vez, la salida del disco Norte sur este y Aquel en La Habana, me sorprendió el año pasado fuera de Cuba, aquí en Miami regularizando mi residencia”.
En CubaOcho el 2 de abril
Vanito ha escogido a CubaOcho como su casa y habitualmente se presenta allí. “Invito a todos. Como dice la canción: ‘Vamo’ a sentirnos chévere’. Siempre suelo interpretar éxitos del repertorio de Habana Abierta: Corazón Boomerang, Divino Guión, Lo bueno no sale barato y otros. Y por supuesto, los temas del nuevo disco. Va ser como suelen ser mis conciertos: una gran fiesta”.
Vanito Brown se presenta el 2 de Abril, a las 11.30 p.m., en CubaOcho Museum and Performing Art Center en La Pequeña Habana. 1465 SW 8th Street, Suite 106 Miami, Telf. 305 285 5880.
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