MIAMI.- En el cierre de la 39 edición del Festival Internacional de Teatro Hispano de Miami se seleccionó Lear, versión de El Rey Lear de William Shakespeare, en una atinada, moderna, imaginativa y dinámica versión de Naher Jacqueline Briseño, quien también asumió la dirección, en una producción de Teatro Avante, la institución convocante del Festival.
Por tratarse este año 2025 de un Festival de Teatro marcado por el fallecimiento de Mario Ernesto Sánchez, director artístico del evento, se presentó a modo de tributo póstumo un segmento escénico de 15 minutos que bajo el título de ¡Umpa! la voz presente, acogió a los actores Alina Interián, Marilyn Romero, Yani Martin y Gerardo Riverón, acompañado por la violinista Daniela Padrón, para dramatizar fragmentos de obras dirigidas por Mario Ernesto Sánchez. Se dijeron textos de Electra Garrigó de Virgilio Piñera, Bayamesa y En algún lugar del mundo, de Abel González Melo (en los últimos tiempos el dramaturgo residente del evento), y Al pie del Támesis de Mario Vargas Llosa. Un homenaje emotivo interpretado por quienes trabajaron durante años junto al fallecido fundador de Teatro Avante.
Al finalizar se explicó que ¡Umpa!, era la frase que Mario Ernesto repetía durante los ensayos, exhortando a los actores a crecerse y darlo todo en escena.
Para Lear la directora Briseño toma la esencia de la obra de Shakespeare, donde el Rey, ya anciano decide dividir su reino entre sus tres hijas. Dos de ellas Goneril y Regan se desbordan en elogios y adulación, mientras Cordelia la más joven de todas, es honesta y expresa el cariño que siente por su padre, pero dice que no siente amor por él. El Rey se enfurece, la deshereda y la expulsa del palacio. A partir de ese momento comienza la tragedia marcada por ambiciones de poder, engaños, traiciones y mentiras, y también la angustia del soberano.
Como espectador he seguido el trabajo de Julio Rodríguez a lo largo de los años, pero jamás lo había visto tan completo, desgarrado, en posesión total de un personaje como su Lear. Su expresión, gestualidad y vibraciones de su cuerpo marcaban el ritmo interno del papel que ejecutaba. Lo proyectaron a un nivel actoral superior.
La hijas del Rey, vestidas con elegancia y novedosos tocados en la cabeza, preparaban las escenas y situaciones. Desdoblan sus ambiciones y allanan el camino para la traición. La tres hermanas están muy a tono, Claudia Valdés como Goneril y Laura Alemán como Regan. Cordelia, la menor, y despojada de toda herencia lo interpreta Claudia Tomás transmitiendo la inocencia y candidez de su personaje.
El trabajo de Daniel Romero como el bufón es muy demandante. Hace de narrador, encargado de anticiparse a lo que ha de ocurrir. Además, le imprime a la obra un ritmo acelerado, usando un teléfono que proyecta en una pantalla grande al fondo del escenario algunas escenas. Maneja con precisión el dispositivo, logrando primeros planos que demandan más de los actores.
El recurso de las tecnología de punta, le imprime a la puesta una poderosa intensidad. No es algo nuevo, ya se ha hecho, pero a este clásico de Shakespeare le aporta un enorme salto en el tiempo, consiguiendo que al ser escuchados los textos, se sientan contemporáneos, incluso cada cual se lo puede ajustar a su propia realidad: “la echaste porque no supo adormecerte el oído”, le dice el Bufón a su Rey, viejo y decadente, pero con poder para ordenar que se haga su voluntad. Esa realidad del poder y de decidir sobre el futuro de los demás se vive a diario en el mundo.
La directora Jacqueline Briseño logra un espectáculo encomiable desde la sencillez de un escenario casi desnudo, dejando que sea el peso de las palabras y el lenguaje corporal quienes dominen todo el tiempo.
Jorge Noa y Pedro Balmaseda de Nobarte, crearon un concepto escenográfico con paneles de cristales y ruedas que abren, cierran o expanden el escenario. A su cargo estuvo también el vestuario que jugó un papel importante en particular con las actrices. El concepto de luces de Ernesto Pinto resultó muy efectivo.
Concluye la 39 edición del Festival, se abre el camino para la 40, y para que los nuevas autoridades designados por Mario Ernesto Sánchez, mantengan la marcha constante e indetenible del evento. ¡Umpa! para el Festival.