MIAMI.- La novela Reunión, de la londinense Natasha Brown, irrumpe en la escena literaria en inglés, español y una decena de idiomas por la sutileza al narrar y el abordaje de temas polémicos como la diversidad. Publicada en marzo de 2022 por la Editorial Anagrama, este libro de unas 120 páginas no necesita mayor extensión para dejar al lector con una piedra en el pecho.
“¿Qué significa ser mujer y ser negra hoy en Inglaterra pese a tener una carrera de éxito? Una mujer repasa su vida y toma una decisión”, indica la nota editorial de Anagrama. Y agrega que la protagonista “es una triunfadora. Lo ha hecho todo bien: tiene un buen trabajo en el sector financiero y la acaban de promocionar; además tiene un novio de familia adinerada cuyos padres son los que han preparado la fiesta en la campiña inglesa. Sin embargo, en esta existencia teóricamente perfecta hay algunas grietas. Y al pasar revista a su vida, como una señora Dalloway o un Colin Smith del siglo XXI, esta joven exitosa, aparentemente tan bien integrada en la clasista sociedad inglesa, se replantea muchas cosas, y se dispone a tomar una decisión que lo cambiará todo…”
Según añade la nota, la novela “indaga sobre cómo en lo más profundo de una sociedad supuestamente abierta y multirracial sigue presente el fantasma del colonialismo”.
El nombre de la protagonista de la historia no es relevante para la trama, pues encarna a muchas personas que podrían estar en situaciones similares y experimentar, como este personaje, el momento en que un jefe te promueve por tu color de piel o procedencia para fomentar la “diversidad”.
En esta novela, temas tan señalados por estos tiempos como la discriminación, las clases sociales, el género, la meritocracia y la diversidad son analizados desde la ficción con una poderosa garra. Brown logra mostrar de un modo ligero asuntos determinantes para una persona que pueda sentirse de algún modo relegada en una sociedad.
El debut literario de la autora londinense usa el monólogo interior y la cadena de pensamientos para mostrarnos las ideas y conflictos de una mujer negra en el Londres actual. Se trata de una joven exitosa, con una vida profesional ejemplar y una jugosa cuenta de ahorros, que se alista para ir a una fiesta mientras recapitula su vida. Enfrentada a sutiles gestos de discriminación, ofrece un contundente y a la vez sensible discurso sobre lo que pueden sentir las minorías en una sociedad.
Brown pone al desnudo tensiones raciales y culturales en la sociedad inglesa, pero sin aspavientos dramáticos ni efectismos, sino desde un íntimo y pulcro discurso. De ahí que el efecto sea más impactante, por la contención de las acciones y descripciones. Todo está ahí, no es la autora la que grita, sino el lector. Por eso la experimentación formal radica en la manera de narrar, en las cápsulas visuales que arma, con muy pocos detalles, en un ejercicio donde el lector completa y se apropia de la historia.
La joven, cuyas raíces son de Jamaica, logra transmitir un hastío que subyace en toda la novela, un cansancio y también una especie de vacío donde a pesar de tener lo que muchos consideran éxito, la protagonista no encuentra suficientes motivos para soñar, estar y encontrarle sentido a la vida. La presión es constante. Escribe en una parte de la novela, “sé la mejor. La más trabajadora, la más eficiente. Supera todas las expectativas. Pero, además, sé invisible, imperceptible”.
Quedan en la memoria del lector, como un pulso que se repite en ondas, la molestia de vivir en un sitio en el que “están siempre diciéndote que te marches, sin saber, sin conocer. Sin historia”. Al hacer un viaje regresivo, cuenta que “vinimos y construimos y reparamos y atendimos; cocinamos y limpiamos. Pagamos impuestos, pagamos un alquiler exorbitante a los pocos caseros que nos aceptaban. Y recibimos odio”.
Así la autora describe esa sensación de ser “nacida aquí, padres nacidos aquí, siempre aquí y, sin embargo, nunca de aquí”. Brown consigue impregnar al lector con ese sabor amargo tras las palabras de un colega de trabajo a la protagonista: “Los negros y los latinos lo tenéis mucho más fácil”.
Más sobre la autora
Natasha Brown ha pasado una década trabajando en una empresa financiera, después de estudiar Matemáticas en la Universidad de Cambridge. Recibió el London Writers Award 2019, Burgess Fellow en 2022 en el Centro de Nueva Escritura de la Universidad de Manchester y fue finalista del Women's Prize x Good Housekeeping Futures Award.
Reunión, su primera novela, se ha convertido en un acontecimiento en Inglaterra, y los derechos de traducción se han vendido a más de quince lenguas.