Basta dejar atrás los campos de amarillos y verdes de La Mancha y cruzar la Sierra Morena para darnos cuenta que un mar de olivares anuncia la llegada a la tierra de Andalucía.
Basta dejar atrás los campos de amarillos y verdes de La Mancha y cruzar la Sierra Morena para darnos cuenta que un mar de olivares anuncia la llegada a la tierra de Andalucía.
Primero, proponemos prescindir de la imágenes archiconocidas de la Giralda de Sevilla, la Mezquita de Córdoba y la Alhambra de Granada para andar por las calles de pueblos y ciudades y descubrir las cosas que el andaluz de a pie disfruta a diario.
Sevilla, monumental
Esta ciudad guarda aún la huella de fenicios, romanos, visigodos, árabes y judíos que es a su vez entrelazada con la permanencia de cristianos y gitanos. Es una singular mezcla cultural que comenzó hace más de tres mil años sobre la margen del río Guadalquivir y que se admira hoy en cada rincón de la urbe, donde el buen comer está dado por el tapeo, ese invento tan español que permite la degustación en pequeñas porciones.
Si le gusta el ambiente taurino, eso que encierra la historia del juego con los toros hasta asesinarlos, el Mesón Serranito, propiedad de un antiguo torero, le gustará. Pruebe la ensaladilla rusa, que de rusa nada tiene, para conocer la diferencia entre la que conocemos en Miami y la que los sevillanos hacen.
En la página web VisitaSevilla.es encontrará toda la información que necesita para conocer esta gran ciudad.
Más que Granada
Es el gran complejo arquitectónico de la Alhambra su gran tarjeta de presentación, donde el arte árabe dejó su huella mayor, pero en los callejones del Albaicín, esa pintoresca barriada que ocupa las colinas de la ciudad, es donde mejor defienden a la cultura del Al-Andalus. Aquí abundan los cafés, los bares y los restaurantes, algunos de ellos habilitados en cuevas, donde el flamenco tradicional, ese que no es preparado para los turistas, tiene refugio seguro.
Del Albacín destaco a la calle de Elvira, la plaza Nueva y la carrera del Darro, donde el tapeo es abundante. En la placeta Toqueros está la peña La Platería y ofrece unas veladas flamencas que distan mucho de los espectáculos comerciales que conocemos en América.
Consulte el portal GuiaDeGranada.com para saber los pormenores que destacan la oferta cultural y gastronómica de la ciudad.
Córdoba, siempre grande
Esta ciudad fue capital de la provincia romana Hispania Ulterior Baetica y más tarde fue el centro de la cultura árabe durante la ocupación musulmana. De esa última etapa tan fructífera, sobresale La Mezquita con su gran policromía, pero es el buen comer cordobés lo que nos ocupa hoy.
Proponemos Bodegas Campos, en calle Lineros, que abrió sus puertas al público hace más de 100 años y desde entonces ha sido un referente en la cultura culinaria de la ciudad.
Además de la amplia carta, que oferta un sinfín de entrantes, carnes, arroces y pescados, el muy respetado local, a donde acuden reyes y presidentes, cuenta con un tablao muy familiar, enclavado en el sótano, donde el taconeo resalta los movimientos de las bailaoras que son fieles a la llamada escuela cordobesa del flamenco.
En el portal cibernético TurismoDeCordoba.org hallará otros detalles sobre la urbe andaluza.
Málaga, frente al mar
Esta ciudad andaluza se destaca por su amplia costa que mira al mar Mediterráneo y donde sobresalen los chiringuitos del litoral con pescaíto frito o sardinas asadas.
Pero tierra adentro, donde prevalecen algunas de las edificaciones históricas, tras el intenso golpe que trajo la Guerra Civil Española (1936-1939); sobresale el casco urbano con un sin fin de calles repletas de bares y restaurantes, donde el buen comer está encabezado precisamente por los productos del mar.
Una simple consulta al portal Malagaturismo.com le permitirá conocer las grandes cosas que viven a diario los malagueños.
La señorial Cádiz
Esta ciudad, cuna de la primera Constitución que se promulgó en España, en 1812, mira al océano Atlántico como si mirara a América. Sus calles, plazas y edificaciones recogen las influencias de los grandes comerciantes que llegaban de las antiguas colonias españolas.
De los espacios abiertos destacamos la plaza de la Candelaria con su aspecto de eterno descanso y un singular inventario de fachadas muy señoriales que rodean el parque.
Precisamente en una de las esquinas de este lugar está el centenario Café Royalty, suntuosamente decorado con estucos dorados, mármoles y pinturas que rememora la exquisitez de la Belle Époque, donde aún se reúnen algunos intelectuales y políticos a discutir los temas de actualidad.
Visite CadizTurismo.com para conocer las particularidades de este destino andaluz.
A tener en cuenta
Andalucía ostenta una amplia red hotelera y tarifas asequibles a todos los bolsillos. En el portal de internet Andalucia.org obtendrá toda la información que necesita.
Cómo llegar
Esta región española cuenta con un magnífico servicio de trenes, aviones y carreteras que une a sus principales ciudades con la capital española, Madrid, y el resto del país europeo. Si porta pasaporte estadounidense no necesita visa o permiso de entrada. Cualquier otra nacionalidad del documento de viaje debe consultar el consulado de España.