MIAMI.- Antes del comienzo de esta temporada en la Liga española, Adalberto Peñaranda, no era tomado en cuenta por Míchel en el Málaga y se especulaba que saldría del equipo. Ahora, después de 17 jornadas el delantero venezolano se ha convertido en una pieza importante del equipo que lucha por superar el mal momento que viven que los tiene en el fondo de la clasificación.
El haberse ganado su puesto en el 11 del Málaga es una buena forma de cerrar el 2017 para el delantero de 20 años, quien también brilló este año con la Vinotinto juvenil en el Mundial sub-20 de Corea del Sur, en el que Venezuela logró un histórico subcampeonato con él como uno de los protagonistas.
"Me lo he ganado, nadie me ha regalado nada y por eso estoy jugando. Gracias a Dios estoy rindiendo en lo que el míster me pide y espero seguir aportando muchas cosas más al equipo", señaló Peñaranda sobre su momento con el Málaga, en una entrevista publicada en el portal en español de la UEFA.
El buen momento del venezolano contrasta con el de su equipo, ubicado en foso de la tabla de posiciones de la Liga con apenas tres victorias, un par de empates y 12 derrotas, pero que se ha contagiado con Peñaranda en quien confían para escaparse de la zona de descenso en la segunda parte de la campaña.
"Va a ser una súper complicado y tenemos que seguir remando de la forma en la que lo venimos haciendo en estas últimas jornadas donde estamos dejando buenas sensaciones. Éste es el camino", señaló el delantero, quien a pesar de que todavía no ha marcado su primer gol esta temporada en el campeonato español, sí ha logrado cambiarle un poco la cara al juego del Málaga.
Pero este 2017 también ha sido bueno para Peñaranda a nivel de selecciones nacionales. Además de ganar notoriedad con la Vinotinto absoluta, el delantero fue una pieza fundamental en el subcampeonato logrado por Venezuela en el Mundial sub-20 de Corea del Sur, una vivencia inolvidable para el jugador.
"Fue una experiencia muy bonita que voy a recordar para toda mi vida. Nosotros fuimos a competir, con un solo objetivo que era estar en la segunda ronda y eso fue lo que hicimos. Pudimos llegar a la final, lastimosamente me tocó fallar el penalti a mí y eso va a quedar grabado en mi mente por la experiencia que tuvimos y un equipo que siempre creyó", señaló.
Otra de las cosas significativas que dejó el año para Peñaranda fue el haber "heredado" el dorsal 18 en la Vinotinto tras el retiro de Juan Arango, capitán y principal referente del combinado venezolano.
"Es algo que representa mucho. Sabemos la importancia que tuvo Juan Arango en la selección de Venezuela. Fue un jugador con una zurda exquisita y la verdad que llevar su número en la selección es muy importante para mi", finalizó.
FUENTE: REDACCIÓN