BOSTON.- El suspenso acabó en la semifinal de la Conferencia Este con la victoria por 115-105 de los Celtics de Boston ante los Wizards de Washington en el séptimo y decisivo partido que les permitió ganar 4-3 la serie al mejor de siete.
BOSTON.- El suspenso acabó en la semifinal de la Conferencia Este con la victoria por 115-105 de los Celtics de Boston ante los Wizards de Washington en el séptimo y decisivo partido que les permitió ganar 4-3 la serie al mejor de siete.
Ahora su rival serán los Cavalies de Cleveland, a los que a partir del miércoles los esperan en su campo del TD Garden para disputar el primer partido de la serie al mejor de siete de las finales de la Conferencia Este.
A pesar que tienen la ventaja de campo los Celtics en la serie de la temporada regular entre ambos equipos la perdieron por 1-3, algo que los jugadores de los Celtics dicen que forma parte del pasado, que ahora es otra competición diferente y ellos son un equipo más maduro y experimentado.
Además los Cavaliers llegan a la eliminatoria descansados con 10 días sin ver acción después de haber barrido (4-0) la serie de semifinales ante los Raptors de Toronto y están invictos (8-0) en lo que va de los playoffs.
De nuevo el base Isaiah Thomas, que rechazó haber sentido ningún tipo de presión especial en el partido decisivo, fue el líder encestador al conseguir un doble-doble de 29 puntos y 12 asistencias.
Aunque el verdadero héroe fue el pívot canadiense reserva Kelly Olynyk, que sorprendió con 26 puntos, incluidos 14 en el cuarto periodo cuando se decidió el triunfo de los Celtics.
"Sabía que el partido de esta noche sería grande. También sabía que no iba a ser fácil en absoluto", comentó Thomas tras haber conseguido lo que fue la victoria más importante de su carrera como profesional. "Pero salimos victoriosos".
Thomas dijo que no tienen tiempo para pensar demasiado en el pase a las finales y lo único que deben hacer es aprovechar al máximo el descanso para estar listos el miércoles cuando se enfrente a los Cavaliers.
"Seguro que no salimos como favoritos, pero eso no importa ya que sabemos lo que tenemos que hacer para aprovechar las oportunidades de cara a conseguir la victoria en el primer partido de las finales", valoró Thomas.
Pero sin Thomas cumplió con su condición de líder indiscutible del equipo, la gran sorpresa ganadora fue Olynyk, que encabezó una gran aportación de los reservas de los Celtics, que fueron los que al final hicieron la diferencia a su favor.
Los Celtics recibieron de los reservas la aportación de 48 puntos por tan sólo cinco ce los Wizards, que vieron que tras el quinteto titular no pudieron competir con el banquillo de Boston.
Boston también acertó 11 triples, incluyendo 8 de 13 en la segunda mitad.
"Necesitábamos esto", destacó Olynyk. "Hemos jugado siete partidos durísimos contra un equipo muy bueno, que puede anotar. Necesitábamos ayudar a los titulares, ayudar a Isaiah".
Olynyk admitió que enfrentarse a los campeones de liga no será una misión fácil, pero estarán listos para luchar de nuevo al máximo y demostrar que son un equipo ganador, que volvió a las finales de la Conferencia Este por primera vez desde el 2012.
"¡Qué gran oportunidad de competir contra ellos!", resaltó el entrenador Brad Stevens. "Debemos mentalizarnos que ya hemos logrado algo importante y ahora tenemos que ir a más".
Para Thomas, haber anclado en la final de conferencia reivindica a un equipo a quien algunos consideraron indigno del primer puesto del Este tras la campaña regular.
Además que la clasificación se consiguió con otra gran actuación de Thomas, protagonista de unos playoffs que comenzaron en las fechas en que falleció su hermana menor por un accidente automovilístico.
El jugador de 28 años ha dicho que se refugia de la tristeza en la pista de baloncesto. No ha dejado de elogiar a sus compañeros por darle la fuerza para seguir jugando a su máximo nivel.
"Esto habla mucho del equipo que somos, y de que tenemos confianza mutua", subrayó Thomas. "El partido no salió siempre como queríamos, no fue un partido perfecto, pero seguimos luchando".
El pívot dominicano Al Horford contribuyó con 15 puntos, seis rebotes y cinco asistencias a la causa de Boston.
Mientras que el escolta Bradley Beal lideró a los Wizards, en un séptimo partido por primera vez desde 1979, con 38 puntos, 24 de los cuales llegaron en la segunda mitad.
El alero Otto Porter agregó 20 puntos. John Wall y Markieff Morris acabaron con 18 cada uno. Pero Washington acumuló 15 pérdidas de balón, lo que derivó en 17 puntos de los Celtics, y el equipo de Boston al final fue el mejor.
FUENTE: EFE