Bajo el nombre de “Cubanos”, así en gentilicio y sin nombre de país, es la iniciativa que, cada vez, da pasos más grandes de la mano de la Asociación de peloteros profesionales de la mayor de las Antillas, creada hace poco más de un mes en Miami, capital de la diáspora antillana que tiene como objetivo representar a Cuba en el clásico mundial de béisbol, evento del que han sido apartados todos los jugadores que abandonaron la Isla y que jamás han sido convocados por su país de origen, víctimas de políticas obsoletas y sin respetar, incluso, que es un evento organizado por las Grandes Ligas.
“Esta idea es de todo el que la soñó, sé que muchos se identifican con ella y la llevaremos hasta el final…”, me declaró recientemente el periodista Jorge Morejón en plena transmisión de un juego de los Miami Marlins. Morejón junto a varios ex peloteros, entre ellos el “Duque” Hernández realizan gestiones en distintos niveles y por el momento han recibido una muy alentadora respuesta de la cúpula del sindicato y del comisionado en las mayores, Rob Manfred con quien han de reunirse muy pronto.
“Esperamos que nuestra idea sea el punto de partida para un proyecto que va más allá del clásico mundial y que a su vez una a los cubanos que aman el béisbol en todos los rincones del mundo, pues este deporte nos pertenece a todos y el legado de Miñoso, Oliva y Dihigo debe honrarse con los mejores exponentes cubanos en el máximo evento sin ser discriminados”
La representación cubana al clásico mundial, de aprobarse su equipo de exiliados, podría reunir a grandes luminarias: una mezcla de peloteros nacidos en la isla o descendientes de cubanos como el antesalista, Nolan Arenado, quien estaría muy feliz de jugar junto a Abreu, Chapman, Gurriel, Álvarez, Arrozarena, Grandall, Luis Robert y “Candelita” Iglesias, entre otros.
El ex Big Leaguer, Eddie Oropesa, es parte de la directiva de la asociación de peloteras profesionales cubanos y sentenció “No nos para nadie, si nos ponen obstáculos organizaremos topes y nuestro equipo hasta podría ser un espectáculo en la preparación de otras selecciones. La Federación Cubana no cuenta con jugadores de la calidad que nosotros tenemos y eso es porque han perdido talento, credibilidad y prestigio. Ahora nos toca a nosotros, los cubanos libres”
Cuba podría organizar uno de los equipos más competitivos de la justa, reuniendo junto a los antes mencionados a jugadores que se encuentran en Asia (Puig, Martín, Viciedo) y hasta grandes prospectos de liga menor como por ejemplo Miguel Antonio Vargas.
Quedan por delante pasos muy importantes, incluso en el ámbito legal. Urge el apoyo de muchas organizaciones del exilio, y por supuesto una posición firme de las grandes ligas de cara a las maniobras que desde ya se orquestan en La Habana, donde golpea desde la génesis el claro y demoledor mensaje que trasmite al pueblo este equipo de “Cubanos libres”, un giro que, por primera vez en 60 años, une los corazones de los fanáticos dentro y fuera del país.
La bola de va elevando….