La sombra del francés Zinedine Zidane, legendario exjugador del Real Madrid, comienza a sobrevolar sobre el actual entrenador del club, Rafael Benítez, cuya continuidad en el puesto está seriamente amenazada.
Según coinciden el martes los principales medios españoles, cuatro meses después de firmar un contrato de tres años con el Real Madrid y mostrar lágrimas de emoción en su presentación, Benítez está en la cuerda floja. Ahora mismo, pocos apuestan por él siquiera para terminar la temporada.
Después de perder el domingo 1-0 en Villarreal, "Marca" aseguró que "el crédito de Benítez empieza a agotarse y el banquillo está en el punto de mira de la zona noble". Así aparece el nombre de Zidane, un mito para el Real Madrid y un ídolo personal para Florentino Pérez, su presidente.
El francés es actual entrenador del Castilla, el segundo equipo del Real Madrid, con el que la pasada temporada no pudo conseguir ascender a la segunda categoría de fútbol español. Esta campaña es su segundo intento.
Antes, Zidane, héroe de la Liga de Campeones ganada en 2002 por el club blanco, fue probando en todos los puestos que le pidió a Pérez. Fue delegado, director del fútbol, mánager... Hasta que hace un año y medio, tras probar como ayudante de Carlo Ancelotti, decidió iniciar su carrera como entrenador.
Según "El País", una de las condiciones para despedir a Benítez es que "el club encuentre a un entrenador con el perfil adecuado, tarea que todos los implicados coinciden en calificar de difícil, y para la que, hasta ahora, no han considerado seriamente otra figura que Zidane".
"El Mundo" coincidió en que "el primer nombre en la lista de sustitutos es Zidane, que ascendería del Castilla al primer equipo, si acepta el reto".
Muy a su pesar, teniendo en cuenta su personalidad introvertida, Zidane ya ha tenido que ver en las últimas semanas cómo los periodistas acudían a ver al Castilla para preguntarle después: "¿Se siente preparado para entrenar al Real Madrid ya?".
Y el francés respondió invariablemente: "Yo soy entrenador del Castilla. Benítez es el entrenador del primer equipo y las cosas están bien así".
Lo cierto es que Benítez parece estar contra las cuerdas y no pareció casualidad que toda la prensa hablara hoy unánimemente de su difícil situación.
Los números no juegan a su favor: está a cinco puntos de los líderes, Barcelona y Atlético, en la Liga española, perdió 15 puntos en 15 jornadas disputadas y lleva 23 goles y nueve puntos menos que el Real Madrid de Ancelotti en la pasada temporada.
Tampoco tiene el apoyo de una importante parte de la hinchada, que no duda en abuchearlo cada vez que presentan su nombre por megafonía antes del comenzar cada partido.
La relación con sus futbolistas tampoco parece ayudarle, a juzgar por los comentarios periodísticos que hablan de choques con estrellas como Cristiano Ronaldo, Toni Kroos o Sergio Ramos.
En este ambiente intenta Benítez corregir la trayectoria de un equipo todavía sin identidad. Y la sombra de Zidane comienza a alargarse más y más.
