Un año después de que Catar recibió la Copa Mundial masculina, el grupo de derechos humanos Amnistía Internacional le pidió a Emirato Rico en Gas y a la FIFA que hagan más por los migrantes trabajadores que fueron esenciales en la preparación al torneo y que aún enfrentan abusos laborales.
El trato de Catar a los cientos de miles de trabajadores migrantes, que tuvieron que trabajar en el abrasador calor, así como la lenta implementación de las reformas laborales generó críticas durante la década previa al inicio del torneo el 20 de noviembre del 2022.
Antes, durante y después del Mundial, este emirato rico en gas enfrentó numerosas críticas por su historial en materia de derechos humanos y por su trato a los trabajadores migrantes.
El jueves, Amnistía aseguró que se detuvo todo progreso desde que terminó el Mundial.
“Catar y la FIFA deben urgentemente asegurar el derecho de las víctimas a una resolución y que no les nieguen o aplacen la compensación”, dijo Amnistía en un comunicado.
La FIFA y la Organización Internacional del Trabajo, que recibe el apoyo de las Naciones Unidas, reconocieron que aún existen retos por superar y que se necesita hacer más para que cumplan las leyes laborales de Catar.
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La árbitro Salima Mukansanga muestra el tiempo de descuento durante el partido entre Túnez y Francia en la Copa Mundial, en Al Rayán, Catar, el 30 de noviembre de 2022.
AP Foto/Martin Meissner
Los derechos laborales siguen siendo un problema casi 13 años después de que los líderes de la FIFA eligieron de manera sorpresiva a Catar para recibir el Mundial 2022.
Catar gastó cerca de $200.000 millones en proyectos masivos de construcción antes de recibir el evento de fútbol más grande, incluyendo estadios, calles, líneas de metro y hoteles. La mayoría de los estadios recibirán a la Copa de Asia de 24 equipos que inicia en enero.
En un comunicado, la FIFA indicó el jueves que una de sus subcomisiones seguía estudiando el impacto de las reformas llevadas a cabo por Catar.
"Es innegable que se realizaron progresos significativos, pero también está claro que la puesta en marcha de reformas tan profundas lleva su tiempo y que es necesario un mayor esfuerzo para asegurar que beneficien a todos los trabajadores del país", añadió la FIFA.
Catar cuestionó el número de fallecidos en accidentes laborales, que las organizaciones de derechos humanos afirman que son miles y acusó a sus críticos de practicar una política de doble rasero.
El gobierno catarí aseguró el jueves que su compromiso de salvaguardar los derechos laborales “siempre tuvo la intención de continuar después del torneo”.
A un año de haber albergado el torneo, no se resuelve aún nada.
FUENTE: AP