En estos momentos el precio promedio del galón de gasolina regular es de 3,29 dólares, un 10% menos que en la misma época del año pasado, lo que no significa que sea barata si se compara con años anteriores durante el gobierno del presidente Donald Trump, cuando el promedio rondaba los 2,25 dólares el galón regular.
A pesar de que el precio ha descendido de los 5 dólares como promedio en 2022, la situación de asfixia financiera que viven millones de estadounidenses durante casi tres años de inflación histórica, desmerita esa reducción.
Asfixia financiera
Ahora mismo, el precio de los alimentos ha seguido su escalada durante más de tres años (desde 2021 han crecido más de un 70%), lo mismo ocurre con los seguros, las viviendas y la compraventa de vehículos, entre otros sectores. Por tales razones, la disminución del precio del combustible no representa verdaderamente un alivio real para los consumidores, sino simbólico y propagandístico para la administración de Joe Biden, que intenta convencer a los estadounidenses de que sus políticas económicas son efectivas, a menos de un año de las elecciones presidenciales en noviembre de 2024.
En realidad, ha sido lo contrario en sus casi tres años de gobierno, donde la escalada de los precios de consumo llegaron al 9,1% en junio de 2022 y se mantienen casi al mismo nivel, aunque el Departamento de Comercio y Trabajo afirmen lo opuesto a lo que sufre el bolsillo de la mayoría de los estadounidenses.
La Reserva Federal, luego de 11 subidas consecutivas, llevó las tasas de interés a 5,25%-5,50%, el más alto en los últimos 22 años. El alto costo del crédito junto a los elevados precios de casi todos los productos genera una combinación brutal para los consumidores, con salarios totalmente desfasados de la realidad.
Recientes estudios confirman que más de un 48% de los estadounidenses apenas puede llegar a fin de mes y gran parte lo hace mediante tarjetas de créditos con intereses por encima del 23%.
Los precios siguen altos
Según la triple A, después de ajustar por los supuestos niveles de inflación (términos reales), los precios minoristas de la gasolina este fin de semana de Acción de Gracias son un 13% más bajos que el año pasado, pero siguen siendo mucho más altos que los niveles prepandémicos por tercer año consecutivo.
Una menor demanda de gasolina de lo habitual en este otoño y una transición temprana a la gasolina de mezcla de invierno en California ayudaron a acelerar una ligera disminución de los precios, cuyo promedio meses atras superaba los 3,65 dólares el galón regular.
Las regulaciones sobre la presión de vapor de la gasolina permiten a las refinerías cambiar a componentes menos costosos para producir gasolina en el otoño, lo que tiende a reducir los precios de la gasolina.
A pesar de los recortes en la producción de petróleo crudo por parte de los miembros de la OPEP y OPEP+ durante el último año, las preocupaciones sobre una desaceleración del crecimiento económico que reduzca la demanda mundial de petróleo han presionado a la baja los precios del petróleo crudo.
El precio del petróleo crudo Brent disminuyó un 15% desde su máximo más reciente de 96,55 dólares por barril el 27 de septiembre a 82,32 dólares el 20 de noviembre, su nivel más bajo desde julio.
Los precios del petróleo crudo son el principal impulsor de los precios de la gasolina en Estados Unidos y representan el 55% del costo total para producir un galón de gasolina.
Variación según las regiones
Los precios de la gasolina en Estados Unidos varían regionalmente, lo que refleja las condiciones locales de oferta y demanda, las diferentes especificaciones de combustible requeridas por las leyes estatales y los impuestos.
Los precios regionales de la gasolina suelen ser más altos en la costa oeste debido a las conexiones limitadas de la región con otros centros de refinación importantes, las estrictas condiciones locales de oferta y demanda y las especificaciones de la gasolina que hacen que su fabricación sea más costosa.
Los precios de la costa oeste el 20 de noviembre promediaron $4,42 por galón regular, un 8% menos que en la misma época del año pasado.
La región de las llamadas Montañas Rocosas enfrenta limitaciones logísticas similares a las de la costa oeste, aunque en general la región tiene menos oferta y demanda. Los precios minoristas de la gasolina en esa zona promediaron $3,20 por galón el 20 de noviembre, un 12% menos que en 2022.
En ambas costas
Los precios de la gasolina suelen ser los más bajos en la Costa del Golfo, que posee aproximadamente la mitad de la capacidad de refinación de Estados Unidos y produce más gasolina de la que consume.
El 20 de noviembre, el precio minorista promedio de la gasolina en la Costa del Golfo era de $2,79 por galón, un 8% menos que en la misma época del año pasado.
En la costa este, que tiene la mayor demanda de gasolina de las cinco regiones, los precios minoristas de la gasolina promediaron $3,17, un 11% menos que en 2022.
En el Medio Oeste, los precios disminuyeron un 11% respecto a esta época del año pasado hasta un promedio de $3,12, el lunes antes del Día de Acción de Gracias.
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