MIAMI.- Su historia demuestra que la discapacidad es simplemente una barrera del colectivo imaginario. Y que las limitaciones físicas y crónicas se pueden convertir en un motor de arranque, cuando hay voluntad y capacidad de sacrificio. Así lo entiende el joven cubano José Carlos González (31), conocido como Tito, quien vive su vida “sin un brazo, pero también sin límites”.
Razón por que tras perder su empleo durante la pandemia se atrevió a emprender y a soñar en grande. Consolidando una de sus grandes pasiones, la cocina. Así nació ‘Tu deliciosa croqueta’, emprendimiento con el que ha conquistado el paladar de la estrella del rap cubano, Yotuel, el dúo Gente de Zona, entre otros artistas insignes de la comunidad cubana en Miami que han aprobado sus populares productos definiéndolos como “La verdadera croqueta cubana”.
“Frases como esas las he convertido en nuestro eslogan y son las que me impulsan a seguir creciendo porque esta pasión no nació de un día para otro. En Cuba era cocinero y dulcero. De niño me atraía la gastronomía, por eso estudié elaboración de alimentos y pude profesionalizar ese talento que hoy desarrollo en Miami”, dijo Tito, quien arribó a Estados Unidos en el año 2014 luego de cruzar la frontera procedente de México.
“Como todo inmigrante, debo reconocer que establecer mi propia marca no ha sido un camino fácil. Fregué carros, fui chofer, y deambulé por varias empresas. Fue una época en la que aprendí que hay que tener voluntad y buena actitud para asumir cualquier desafío, si no es así, es muy difícil prosperar”, recordó el emprendedor que, tras perder su trabajo a causa de la pandemia, decidió comenzar a hacer croquetas en casa para vender a sus amistades.
Estilo y sabor cubano
Con una inversión que no sobrepasó los 300 dólares, Tito comenzó el proyecto de Tu deliciosa croqueta, marca que ya cuenta con un carro de servicios a domicilio, un moderno puesto con presencia en eventos públicos y privados, y una cartera de clientes que incluye a artistas, ‘influencers’ y empresarios locales.
“Mi producto constituye una mezcla muy interesante que fusiona la croqueta cubana y la española. El estilo español es más suave, y el cubano es mucho más duro y compacto, y mi croqueta está en el medio”, dijo el joven cocinero que cautiva los paladares de Miami con sus creaciones de espinaca, jamón, queso, chorizo, bacalao, pollo, y fusiones innovadoras al gusto del consumidor.
“Tanto fue el éxito de este producto, que tuve que expandir mis servicios para ofrecer lo que los cubanos llamamos ‘mesas de picaderas’, que son estaciones donde los comensales de una fiesta o evento pueden disfrutar de embutidos, quesos, algunas frutas seleccionadas, jamones, y una de nuestras creaciones más pedidas que son los sándwiches de croqueta”, dijo Tito.
“Hoy en día puedo vivir de lo que produce mi marca, gracias a la calidad y la entrega que nos caracteriza. No escatimamos en el costo de los ingredientes de la croqueta, y esa ha sido una de las claves del éxito”, añadió.
Sin un brazo y sin límites
José Carlos González alias ‘Tito’, es un joven resiliente, risueño, y lleno de esperanza. Aunque pocas veces lo menciona a sus clientes y comensales, cuando tenía 20 años perdió su brazo izquierdo en un accidente automovilístico en el que viajaba junto 12 personas.
“Fui de vacaciones con amigos a los Cayos, y cuando estábamos de regreso a La Habana se reventó la goma trasera del carro y nos volcamos. Gracias a Dios el único perjudicado fui yo. Estuve un mes y medio en el hospital lidiando con una recuperación bastante dura, hasta que pude regresar a casa”, recordó.
“A los 20 años todos nos queremos comer el mundo… y toda gira en torno a nuestra apariencia ya que estamos disfrutando de la juventud más plena, así que fue un golpe muy duro y difícil de entender a esa edad. Por otra parte, cuando mi vida cambió, mi familia quedó devastada y muy deprimida, así que decidí levantarlos y animarlos para que no sufrieran más. Recuerdo que los miré a todos y les dije: ‘No hay que llorar más, estos golpes se asumen como vienen y vamos pa’ lante”, recordó el joven, quien reconoce que reconstruirse no ha sido un proceso fácil.
“Nunca me ha gustado depender de nadie para poder hacer las cosas, y ese es el mayor reto todos los días. Muchas veces he querido tirar la toalla, sobre todo cuando estoy intentando hacer algo, creando algo en la cocina, y no me sale […] Es un proceso duro, pero poco a poco he ido forjando mi propia habilidad para hacer las cosas. Y ya es parte de mi vida hacer todo con una sola mano”, finalizó el joven quien busca conquistar paladares, con motivación y mucho sabor.
Si quieres saber más de la marca sigue su cuenta de Instagram @tudeliciosacroqueta