Desde la Casa Blanca, Trump ha indicado también que el Gobierno trabaja para aprobar préstamos a las pequeñas empresas que pueden verse afectadas por el brote, así como mantiene conversaciones con las líneas aéreas, los hoteles y las compañías de cruceros, horas después de que los mercados registraran sus peores pérdidas en más de una década.
Si bien el presidente estadounidense se ha sentido "sorprendido", ha querido minimizar la amenaza del coronavirus para la economía del país, pues tal y como ha resaltado, se encuentra en una situación "fuerte", por lo que ha dirigido sus críticas hacia los medios de comunicación y el Partido Demócrata, por avivar los temores hacia una peor perspectiva.
El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, resaltó que el presidente Trump ha insistido al grupo de trabajo de la Casa Blanca, encargado de gestionar la situación provocada por el coronavirus, que priorice el apoyo a los trabajadores cuyos contratos son por hora y que temen acudir a sus puestos de trabajos por una posible infección.
"El Presidente le ha encomendado al equipo el desarrollo de políticas económicas que dejen muy claro, que el Gobierno apoyará a los estadounidenses que trabajen arduamente", ha anunciado Pence, según declaraciones al periódico 'The Hill'.