La División de Protección del Consumidor de Utah (UDCP) pidió este jueves a los latinos tomar precauciones para evitar ser víctimas de fraude relacionado con estudios terciarios, luego de que el fiscal estatal iniciase una demanda contra el fundador y un exadministrador de la Universidad Hispana de Utah (UHU).
Según la información provista, el fiscal Sean Reyes inició acciones judiciales en contra de Arturo De Hoyos y Kemmerly Edgardo Erazo Pineda, fundador y exadministrador, respectivamente, de UHU, una universidad privada en línea que perdió su licencia para operar en 2012.
Debido a que UHU continuó operando hasta agosto pasado a pesar de haber perdido su licencia en 2012, la UDCP le impuso unas multas por un total superior a los 3 millones de dólares.
La demanda, que pide que los demandados deben hacerse cargo de los gastos legales correspondientes, exige el pago de parte de ese dinero adeudado, incluyendo una multa de 48.000 dólares a De Hoyos, otra de 260.500 dólares a Pineda, y otra de 270.000 dólares a la universidad.
La misma acción judicial prohíbe a De Hoyos y a Pineda dedicarse a cualquier otro tipo de actividad educativa en Utah.
"Si la publicidad de una universidad indica que uno puede obtener un título en poco tiempo o con poco o nada de esfuerzo, probablemente no sea verdad. Si la universidad afirma que el título se obtiene en menos de la mitad del tiempo que las universidades tradicionales, eso debe ser causa de preocupación", dijo a Efe Jennifer Bolton, portavoz del Departamento de Comercio de Utah, agencia a la que pertenece UDCP.
Bolton puntualizó que no podía hablar directamente del caso de UHU, pero pidió que los latinos revisen cuidadosamente la información de una universidad antes de inscribirse.
De este modo, las personas deben averiguar si la universidad está acreditada, si existen acciones disciplinarias en su contra, si está debidamente registrada en el estado en el que se encuentra su sede e incluso si se trata de una universidad en línea o con clases a distancia.
A la vez, los aspirantes a estudios deben buscar información sobre el éxito de los estudiantes para encontrar trabajo luego de graduarse.
"Una universidad legítima debe ser capaz de proveer detalles sobre el porcentaje de estudiantes que se gradúa de cada uno de sus programas y el porcentaje de esos estudiantes que luego encuentran trabajo", comentó Bolton.
Además, dijo, "nunca se debe aceptar una promesa verbal sobre los servicios que se recibirán".
"Todo debe estar por escrito y firmado por un representante de la universidad antes de que el estudiante complete el formulario de inscripción", concluyó.
