DENVER.- Varias áreas del oeste y centro-norte de Estados Unidos estaban bajo alertas de calidad ambiental el domingo debido al humo emanado por los enormes incendios forestales en el país.
DENVER.- Varias áreas del oeste y centro-norte de Estados Unidos estaban bajo alertas de calidad ambiental el domingo debido al humo emanado por los enormes incendios forestales en el país.
Las autoridades emitieron alertas en gran parte del norte de las Rocallosas incluidas partes de Colorado, Wyoming, el estado de Washington y Idaho.
Hacia el oriente, el humo de los incendios provocó alertas de contaminación en Wisconsin, Minnesota e Iowa.
Los incendios emiten grandes volúmenes de partículas de humo microscópicas que pueden ser dañinas si se respiran y provocar problemas en la salud a corto y largo plazo. Los niños, personas mayores y personas con problemas subyacentes de salud corren mayor riesgo.
Bomberos logran avances en la lucha contra incendios
Los bomberos de Oregon reportaron avances en la lucha contra el incendio forestal más grande de Estados Unidos, mientras que las autoridades cancelaron las órdenes de evacuación cerca de un fuego de gran tamaño en el norte de California.
La contención del incendio Bootleg en una zona remota del sur de Oregon era de un 74% el domingo. En la víspera, estaba contenido en un 56%.
“Eso refleja los días de buen trabajo en el terreno donde los equipos han podido reforzar y montar líneas de contención adicionales”, dijo el portavoz del Departamento de Bomberos, Al Nash, el domingo.
El incendio ha arrasado con 1.673 kilómetros cuadrados (646 millas cuadradas) desde que estalló el 6 de julio en el bosque nacional de Fremont-Winema.
El incendio Dixie de California cubría cerca de 992 kilómetros cuadrados (383 millas cuadradas) en montañas donde 42 viviendas y otros inmuebles han quedado destrozados.
Estaba contenido en un 32% el domingo, y las órdenes de evacuación y alertas fueron retiradas para varias zonas lejanas de los condados de Butte y Plumas. Sin embargo, las autoridades advirtieron que, debido a los vientos imprevisibles y a combustibles extremadamente secos, el riesgo de que se produzcan otros fuegos sigue siendo alto.
La causa del incendio, que estalló el 13 de julio, sigue bajo investigación.
Cerca de 22.000 bomberos y personal de apoyo combatían 91 incendios forestales grandes y activos que cubrían 7.285 kilómetros cuadrados (2.813 millas cuadradas) en estados occidentales, señaló el Centro Nacional e Interagencial de Incendios.
Una sequía histórica y recientes olas de calor relacionadas con el cambio climático han complicado el combate a los incendios forestales en el oeste de Estados Unidos. Los científicos dicen que el cambio climático ha hecho que la región sea mucho más cálida y seca en los últimos 30 años y que seguirá haciendo que el clima sea más extremo y que los incendios sean más frecuentes y destructivos.
La semana pasada, el Monitor de Sequía de Estados Unidos reportó que, si bien un fuerte monzón ha aportado lluvias para paliar la sequía en el suroeste, las condiciones de sequía crítica persisten en el norte de California y en el noroeste de la nación, donde se ha producido una ampliación de la “sequía excepcional”, la peor categoría.
FUENTE: Con información de AP