KABUL.- En un ataque de los talibanes que duró más de 13 horas contra el Hotel Intercontinental de Kabul, la capital de Afganistán, murieron 43 personas, aseguró hoy en Twitter el canal de televisión Tolo, que cita a una fuente de seguridad "fiable".
El portavoz del Ministerio del Interior Nayib Danish había informado previamente de la muerte sólo cinco o seis civiles, entre ellos una mujer extranjera, y seis atacantes.
La información del canal coincide con algunas declaraciones de supervivientes, que aseguraban que la cifra de víctimas proporcionada por las autoridades era demasiado baja.
Horas después de terminado oficialmente el incidente siguieron registrándose disparos y explosiones en el hotel, situado en una colina. El portavoz policial Basir Muyahid reconoció más tarde que los enfrentamientos continuaban. No fue hasta 17 horas después del inicio que se retiró la mayoría de las fuerzas de seguridad, señaló.
Las fuerzas de seguridad afganas suelen dar cifras de muertos menores a las reales para tratar de no alarmar más a la ya nerviosa población de la capital, donde en 2017 hubo más de 20 atentados graves de los talibanes y de la milicia terrorista Estado Islámico (EI) con más de 500 muertos.
Un testigo que fue sacado del edificio por las fuerzas especiales señaló a dpa que el número de muertos es "mucho más alto" que las cifras oficiales. Los atacantes iban puerta por puerta buscando específicamente a los extranjeros y funcionarios gubernamentales para dispararles, relató.
La televisión Tolo TV mostró escenas dramáticas de huéspedes del hotel que intentaban descolgarse de los balcones de los pisos superiores mientras salía humo del edificio. Un hombre que trataba de bajar de un piso a otro con ayuda de sábanas anudadas se soltó y cayó.
Los talibanes se atribuyeron el ataque en un mensaje y aseguraron haber matado a decenas de enemigos extranjeros y afganos.
Un portavoz del Ministerio del Interior, Nasrat Rahimi, dijo por el contrario que en total hay seis civiles muertos, entre ellos una mujer extranjera. No informó sin embargo sobre su nacionalidad. Además hay siete heridos. Los atacantes abatidos son cuatro, añadió.
Otro portavoz, Nayib Danish, dijo que las fuerzas especiales rescataron del hotel a 153 personas, entre ellas 41 extranjeros.
El número de huéspedes extranjeros en el Intercontinental se ha ido reduciendo en los últimos años. Debido a la peligrosa situación de seguridad en Kabul ya no se lo considera un lugar seguro.
Las autoridades confirmaron que al momento del ataque se estaba celebrando en el hotel una boda y además había unos 100 huéspedes que se habían desplazado para una conferencia de expertos en informática afganos.
Una parte del hotel se incendió. En la mañana del domingo, cuando las fuerzas especiales avanzaban sobre el último piso, aún no asegurado y donde al parecer se ocultaba el cuarto atacante, las llamas volvieron a intensificarse. En ese piso había aún personas atrapadas.
Los yihadistas entraron al hotel a las 21:00 horas del sábado por la cocina. Poco después el edificio era sobrevolado por helicópteros. La situación recordó a los habitantes de la capital un ataque similar en 2011, cuando nueve talibanes atacaron el hotel y mataron a una decena de huéspedes y empleados. También en ese momento se tardó horas en acabar con los agresores.
Desde el final de la misión de combate de la OTAN en diciembre de 2014 la situación de seguridad en Kabul ha ido empeorando drásticamente. A principios de enero, en el primer ataque del nuevo año, murieron al menos 20 personas y 30 resultaron heridas en un atentado contra un puesto de seguridad.
La embajada estadounidense en Kabul y el Departamento de Estado en Washington habían alertado a finales de la semana pasada del peligro de ataques en Kabul, entre otros en hoteles. El reportero de dpa presente en el lugar vio varios vehículos de las tropas internacionales, cuyo papel en la acción de rescate no fue detallado por el Ministerio del Interior.
FUENTE: dpa