La Cámara de Representantes de Estados Unidos rechazó este miércoles una propuesta que hubiera obligado al presidente Barack Obama a retirar todas las tropas estadounidenses de Irak en tanto los legisladores no aprueben una resolución autorizando el uso de la fuerza militar contra el Estado Islámico (EI).
La cámara baja del Congreso votó 288-139 en contra de la medida que llamaba a replegar todas los efectivos en el transcurso de seis meses.
El congresista Jim McGovern, un demócrata que presentó la resolución, esperaba forzar a los legisladores a aprobar la propuesta para presionar sobre el hecho de que el Congreso evitó durante meses votar sobre una autorización explícita para combatir a la organización terrorista.
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"Si el Congreso hubiera cumplido con sus responsabilidades, no habría sido necesario ser tan terminante", dijo McGovern, y agregó que la medida habría dado al Congreso "otros seis meses en los que simplemente hacer su trabajo".
A principios de este año, Obama pidió al Congreso que vote sobre la autorización para utilizar la fuerza militar contra EI, pero los legisladores aún no lo hicieron.
Militares estadounidenses bombardean objetivos de EI en Irak desde agosto y en Siria desde septiembre. Obama justificó los bombardeos a través de autorizaciones militares otorgadas por el Congreso después de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001 y antes de la invasión a Irak en 2003, pero solicitó una autorización más específica para la actual campaña.
El mandatario demócrata se enfrenta además a las críticas de los republicanos en medio de una creciente preocupación por la efectividad de las fuerzas iraquíes y la estrategia de Estados Unidos contra Estado Islámico.
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La semana pasada anunció el despliegue de otros 450 efectivos para entrenar y asistir a las tropas iraquíes en la provincia de Anbar con el fin de combatir a militantes de EI, lo que suma un total de 3.500 soldados estadounidenses.
De todas maneras, el secretario de Defensa, Ashton Carter, dijo el miércoles que los esfuerzos de Estados Unidos para entrenar las fuerzas iraquíes se ralentizaron debido a la falta de reclutas.
