Un comité de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza evaluará a partir de este jueves la investigación realizada tras la muerte del mexicano Anastasio Hernández hace casi seis años después de recibir una brutal golpiza por parte de oficiales de inmigración.
La Junta Nacional de Análisis de Uso de Fuerza (NUFRB), quien revisará el caso, fue establecida en diciembre de 2014 por el comisionado de Aduanas, Gil Kerlikowske, como una medida para analizar todo altercado en que agentes detonen un arma, así como incidentes en que el uso de fuerza resulte en heridas de gravedad o en la muerte.
Este jueves, el grupo iniciará otra indagación en la muerte del inmigrante mexicano para determinar si el uso de fuerza utilizado por los agentes respondió al protocolo y posteriormente emitir recomendaciones en torno a acciones disciplinarias, políticas internas, entrenamiento, equipo y tácticas utilizadas por los oficiales.
María Puga, viuda de Hernández y madre de sus cinco hijos, aplaudió el hecho de que la agencia federal realice esta investigación, pues, dijo, es un buen paso en la búsqueda de justicia.
"Esperemos que ahora sí sea algo transparente, que sea la verdad, que digan lo que realmente pasó ese día", comentó a Efe.
Anastasio Hernández murió en el verano de 2010 tras recibir descargas eléctricas y una golpiza a manos de una docena de agentes federales en un altercado registrado en la zona de deportaciones en la frontera entre San Diego (California) y Tijuana (México).
El hecho fue captado por dos vídeos en los que se observa al mexicano esposado en el suelo y pidiendo ayuda.
En noviembre del año pasado, el Departamento de Justicia informó que no se presentarán cargos criminales contra los agentes al no encontrar evidencia suficiente para comprobar que los oficiales y supervisores involucrados aquella noche actuaron con malicia.
Pese a ello, la viuda del mexicano dijo mantener la esperanza en que este caso propiciará cambios al interior de la agencia federal -entre ellos, el uso de cámaras en uniformes- para que estos incidentes no vuelvan a ocurrir.
"Yo siempre he dicho, la muerte de mi esposo no va a quedar en vano, algún cambio se tiene que hacer, eso es lo que me mantiene positiva", abundó.
De su parte, CBP indicó que la conformación de la NUFRB es "una de las tantas iniciativas adoptadas por la agencia para mejorar la rendición de cuentas y transparencia".
Asimismo, la dependencia señaló hoy en una declaración oficial que "planean publicar los hallazgos de los casos que han completado el proceso de investigación interna por parte de CBP".
Pedro Ríos, director del Comité de Amigos Americanos calificó esta investigación, que llega tras la presión de familiares de víctimas y organizaciones civiles, como "un paso positivo que muestra cierto compromiso por tratar de averiguar cuáles fueron los detalles sobre estos casos de uso de fuerza letal".
También reiteró que la intención de grupos activistas es llevar el caso de Anastasio Hernández ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos luego de que el Gobierno federal desestimara levantar cargos criminales contra los oficiales involucrados.
"Lo vemos como un paso viable y lo estamos considerando, tenemos un equipo legal que nos está apoyando con ese esfuerzo", concluyó el activista.
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