La fiscal general de Florida, Ashley Moody, respalda la petición hecha por Texas al Tribunal Supremo para que impida a los estados de Georgia, Michigan, Pensylvannia y Wisconsin certificar la victoria del candidato demócrata Joe Biden en las elecciones presidenciales del pasado 3 de noviembre :“La integridad y resolución de las elecciones de 2020 es de suma importancia”, escribió Moody y agregó que la Corte Suprema de Estados Unidos “debe sopesar los argumentos legales de la moción de Texas y todos los asuntos pendientes para que los estadounidenses puedan estar seguros de que la elección se revisó y decidió de manera justa”.
El tiempo se agota y la cuenta regresiva pesa sobre el equipo de campaña y simpatizantes del presidente Donald Trump, que mantienen acciones legales abiertas bajo alegaciones de fraude en los comicios. Muchos medios de prensa han dado por sentado la victoria de Joe Biden, incluso esta semana, la desestimación de la Corte Suprema a una demanda presentada se dio como absoluta. Sin embargo hay pasos, establecidos por la Constitución que no se pueden violentar u obviar.
DIARIO LAS AMÉRICAS conversó con el analista y capitán retirado de la policía Diego Mella que aclara que “La Corte Suprema desestimó una parte de la demanda, pero no la otra que es el problema de los votos con firmas que no coinciden y que aun así se firmaron. Tienen hasta el 14 para dar un veredicto”
Vamos a subrayar que a esos cuatro estados en disputa les corresponden en total 62 votos en el Colegio Electoral, de manera que, si el Tribunal Supremo se pronunciara a favor de la demanda en cuestión, el resultado de las elecciones podría cambiar, ya que Trump, en este momento acumula 232 votos y Biden 306.
La Corte Suprema es la última instancia o recurso que resta. Vamos a recordar que hace menos de una semana el presidente Donald Trump llamó al gobernador de Georgia, Brian Kemp, para urgirle una auditoría de las firmas de las boletas de votantes ausentes, según reveló el diario The Washington Post. Aunque El gobernador republicano Brian Kemp, rechazó el pedido del presidente, vale la pena preguntarse: ¿Puede un gobernador o el poder legislativo de un estado descalificar una elección, que representaría la voluntad del electorado?
Mella sostiene que: “Los únicos que tienen o pueden decidir si la elección fue bien hecha son el gobernador y su Congreso. El gobernador puede alegar que no puede firmar el documento de acertamiento porque reconoce que ha habido problemas y no encuentra la solución. Es imposible celebrar una segunda elección, pero sí es posible que la Corte Suprema le quite a la persona o al Partido que haya cometido el fraude los electores y se los dé al otro bando”.
En Estados Unidos el Tribunal Supremo es la única instancia con autoridad para dirimir estas disputas.
En cuanto a las elecciones en sí, o en el efecto mediático de nombrar a Joe Biden presidente, Mella aclara que: “Se le llama el presidente electo por el conteo” y agrega que “La ley de los EEUU es clara, el título 3 del código 3 establece que la elección para presidente y para vicepresidente se celebra el martes después del primer lunes de noviembre. En estos comicios, en realidad, se está votando por los electores que son los que van a certificar quien es el presidente”
Ante las dudas y los tiempos del proceso Mella enfatiza: “Este país es muy grande, unos 330 millones de habitantes. Del título 3, el código 6 define que se tiene de noviembre 4 a diciembre 14 para contar los votos. Eso se archiva y los gobernadores de cada estado tienen que firmar el denominado certificado de acertamiento”, el mismo que podría no haber aceptado en Georgia Kemp.
“Se supone que el ganador sea Biden pero todavía no hemos llegado al 14 y es ahí cuando se dice el que va a ganar. Estos documentos son enviados luego al Congreso y entonces se reúnen el enero 6, una sesión conjunta con el Senado. La presidencia comenzaría en enero 20”. alegó.
El tiempo se agota, Biden tiene tantos electores que, aunque pierda un estado ganaría de todas maneras, tenemos que ver el curso que toma en estos días finales de la carrera, todo lo referente a esos 4 estados y si la Corte Suprema toma alguna acción o determinación que haga girar drásticamente las proyecciones.
“Si existen todavía estos problemas con más razón debemos esperar hasta el 14”, concluye Mella.