El gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, dijo este domingo que la explosión del sábado fue un "acto de terrorismo" pero las autoridades aún no tienen pruebas que lo vinculen con el terrorismo internacional.
"Todavía no hay evidencias que lo vinculen con el terrorismo internacional, pero una bomba que explota en Nueva York obviamente que es un acto de terrorismo", dijo Cuomo en rueda de prensa desde el lugar de la explosión.
El gobernador de Nueva York añadió que quienes quiera que hayan sido los responsables de colocar las dos bombas en Manhattan, las autoridades "van a encontrarlos" y serán llevados ante la Justicia para responder por lo ocurrido.
"Una alternativa es ponerse a especular o a formular hipótesis, y otra opción es esperar a los hechos y empezar a partir de ahí. No sería razonable que me ponga a especular sobre algo que todavía no conocemos", añadió el gobernador.
En todo caso, Cuomo advirtió que los neoyorquinos no van a permitir que este tipo de personas y este tipo de amenazas "alteren" sus vidas. "Esto es una democracia, aquí vivimos en libertad, y no les vamos a permitir que nos lo quiten", insistió.
Cuomo afirmó que en esta ocasión hubo "suerte" porque no ha habido que lamentar víctimas mortales y explicó que las 29 personas que resultaron heridas tras la explosión ya han sido dadas de alta en los hospitales.
La explosión del artefacto, colocado en el interior de un cubo de basura, ocurrió hacia las 20.30 hora local (00.30 GMT del domingo) en el barrio de Chelsea, en una zona de la ciudad muy frecuentada por turistas.
Posteriormente, las autoridades localizaron un segundo artefacto a poca distancia del lugar de la explosión y que, según fuentes policiales, era una olla a presión de cuya parte central salía un cableado oscuro.
FUENTE: EFE