Un reo estadounidense, que ha pasado los últimos 25 años en prisión clamando por su inocencia en un asesinato que no cometió, ha sido puesto en libertad en el estado de Illinois a la edad de 46 años, informó el Chicago Tribune.
Shawn Whirl fue acusado en 1990 de asesinar a un taxista de un disparo en la cabeza. Tras su detención, un policía lo torturó con un bastón un manojo de llaves hasta que confesó.
Durante el juicio, el acusado admitió el crimen para suavizar la condena y evitar la pena de muerte. En 1991 fue condenado a 60 años de cárcel, que cumplió en la ciudad de Galesburg. Con el paso de los años, comenzaron a acumularse denuncias contra los dudosos métodos de tortura del policía James Pienta, quien ,según el informe, interrogó a Whirl.
Un tribunal de apelaciones decidió entonces que, teniendo en cuenta las condiciones del interrogatorio, Whirl habría confesado por desesperación y no se le podía mantener en prisión.
El único indicio que había de que Whirl fuera el asesino eran sus huellas dactilares en el taxi. Por su parte, el acusado nunca negó su presencia en el vehículo del asesinado. "Cuando, en lo más profundo de tu corazón, sabes que eres inocente, ¿Cómo vas a rendirte?", le citaba el Chicago Tribune tras su puesta en libertad.
LEA TAMBIÉN:
