WASHINGTON. La muerte en Miami de María Victoria García, de 58 años, abre nuevamente la herida de la masacre del Remolcador “13 de marzo”, perpetrada por el régimen de La Habana hace casi treinta años, el 13 de julio de 1994.
García falleció en Miami a los 58 años. Su muerte vuelve a abrir la herida de la masacre ordenada por el régimen de Cuba en 1994, un crimen que permanece impune
WASHINGTON. La muerte en Miami de María Victoria García, de 58 años, abre nuevamente la herida de la masacre del Remolcador “13 de marzo”, perpetrada por el régimen de La Habana hace casi treinta años, el 13 de julio de 1994.
El Centro por una Cuba Libre lamenta la desaparición física de María Victoria, quien a pesar de la fuerte represión sufrida después de la masacre, no calló y denunció cómo los potentes chorros de agua utilizados por las cañoneras del régimen, arrancaron a muchos niños de los brazos de sus madres, y los hundió irremediablemente en el mar.
Su hijo de 10 años, Juan Mario Gutiérrez García, fue una de las víctimas mortales de aquellos sucesos, junto a otros 13 familiares de los García, hecho que jamás le permitió volver a una vida normal, y que la marcó para siempre física y psicológicamente.
“Yo le dije al coronel que eso no había sido un accidente, que nos hundieron”, dijo en unas declaraciones a Voces de Cuba hace nueve años recordando lo ocurrido.
Su padre, Jorge García, realizó una exhaustiva investigación de los hechos dentro de Cuba y luego de salir al exilio en 1999. Su libro ha sido un testimonio valioso para demostrar que el régimen castrista hundió el Remolcador “13 de marzo” de forma premeditada y que conocía de sus planes de huída desde antes de que se montaran en el remolcador.
Y agregó: "El siniestro no es un caso aislado, el régimen castrista ha utilizado este sistema de hundir embarcaciones que tratan de escapar de la Isla en numerosas veces, la última que se conoce ocurrió en Bahía Honda el 29 de octubre de 2022. Oramos por el descanso eterno de su alma".
FUENTE: Centro por una Cuba Libre