WASHINGTON — El Capitolio de Estados Unidos fue evacuado brevemente el miércoles por la tarde luego de que la policía informó que estaba dando seguimiento a una aeronave que “representa una amenaza probable”, pero resultó ser un avión militar del que saltaron personas en paracaídas para una demostración, dijeron funcionarios a The Associated Press.
La alerta de la Policía del Capitolio provocó que el personal del Congreso saliera a toda prisa del inmueble aproximadamente a las 6:30 de la tarde.
El incidente dejó entrever una sorprendente falla de comunicación entre las fuerzas armadas y la Policía del Capitolio, incluso más notable debido a que Washington se ha enfocado en mejorar la seguridad desde el asalto del 6 de enero de 2021.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, responsabilizó a la Administración Federal de Aviación en un comunicado emitido el miércoles por la noche, señalando que su “aparente omisión para notificarle a la Policía del Capitolio del sobrevuelo del estadio de los Nacionales que había sido planeado de antemano es indignante e inexcusable”. La agencia no respondió a una solicitud de comentarios.
En el incidente del miércoles, la aeronave, un bimotor, despegó de la Base Conjunta Andrews en Maryland y había estado sobrevolando el espacio aéreo fuertemente restringido cercano al Capitolio cuando se emitió la alerta. Los datos de seguimiento por radar muestran que el avión, un De Havilland Twin Otter, permaneció en todo momento fuera del espacio aéreo prohibido sobre el Capitolio y otros complejos gubernamentales. Las grabaciones del control del tráfico aéreo captan al avión del Ejército coordinando su vuelo con la torre de control del cercano Aeropuerto Nacional Ronald Reagan de Washington.
Los investigadores seguían tratando de determinar la razón por la que el evento no se coordinó adecuadamente con las autoridades policiales de Washington, según dijeron dos personas al tanto del asunto. Varias agencias federales empezaron a movilizar a su personal mientras el avión sobrevolaba la zona.
La región de la capital estadounidense está defendida por misiles tierra-aire dispuestos en varios sitios, y por tripulaciones militares en alerta permanente. No parece que ninguno de esos sistemas haya sido puesto en marcha.
Los funcionarios creen, con base en una revisión preliminar, que el piloto podría no haber informado correctamente del despegue o no contaba con la autorización adecuada, dijeron las personas que hablaron con la AP, las cuales pidieron guardar el anonimato porque carecían de autorización para declarar sobre el tema.
“El Congreso está ansioso de examinar los resultados de una revisión exhaustiva posterior a la acción que determine qué fue exactamente lo que salió mal hoy y quién en la Administración Federal de Aviación tendrá que rendir cuentas por este error inaceptable y aterrador”, señaló Pelosi.
El avión regresó a la Base Conjunta Andrews a las 6:50 de la tarde, después de que los paracaidistas descendieron a la mitad del campo de juego en el Nationals Park. El estadio, sede de los Nacionales de Washington, se encuentra a poco más de kilómetro y medio del Capitolio federal.
Una testigo del caos en el Capitolio fue Eireann Dolan, la esposa del pitcher de los Nacionales Sean Doolittle. “Yo estaba paseando a los perros delante del Edificio Dirksen de oficinas del Senado”, tuiteó Dolan. “La gente empezó a salir, toda al mismo tiempo. Me dijeron que me diera la vuelta y me alejara lo más rápido posible. Algunas personas estaban tranquilas, pero muchas habían entrado realmente en pánico. Sé que yo lo estaba”.
Los edificios del complejo del Capitolio fueron reabiertos poco después de las 8 de la noche.
FUENTE: AP