Roberto de Jesús Soto García, el tercer acusado del caso de los sobrinos Flores, no se ha declarado culpable, según informó a DIARIO LAS AMÉRICAS su abogado defensor Russell Neufeld durante una conferencia sostenida este jueves en la Corte del Distrito Sur de Nueva York. Neufeld, entre risas, calificó las informaciones sobre su supuesta declaración de culpa de “fake news”.
Aunque es probable que la situación penal de Soto García se resuelva a través de un acuerdo de culpabilidad y cooperación, pues alrededor del 96 por ciento de los casos de narcotráfico que llegan a las cortes de Estados Unidos se resuelven por esta vía, el caso apenas está en su etapa inicial y la defensa no ha recibido aún toda la evidencia en contra del acusado.
Soto García es señalado de conspirar para ingresar drogas a los Estados Unidos, el mismo cargo que enfrentaron Efraín Campo Flores y Franqui Flores De Freitas, sobrinos de la pareja presidencial de Venezuela. Durante el juicio de los sobrinos Flores, a finales de 2016, la Fiscalía reprodujo parte de una reunión que tuvo lugar el 6 de noviembre de 2015 en Honduras, en la cual Soto García afinaba, junto a Franqui Flores De Freitas, los detalles de la llegada al aeropuerto de Roatán del avión que saldría de la rampa presidencial en Venezuela con de 800 kilos de cocaína a bordo.
El hondureño fue capturado por las autoridades de su país el pasado 28 de octubre de 2016 y fue extraditado a los Estados Unidos el 21 de diciembre de 2017. Hasta el momento solo se ha presentado en dos oportunidades antes el juez de la causa, Paul Crotty.
La primera audiencia ocurrió al día siguiente de su entrada al país y la segunda ocurrió este 28 de junio. La conferencia de estatus sirvió para informar al juez Crotty que las partes están aún en conversaciones y que se volverán a reunir el próximo 2 de agosto.
Soto García llegó a las 3:15 pm a la sala 14C del 500 Pearl Street, con esposas en sus pies y ataviado con el uniforme azul de la prisión. Lucía serio, hizo contacto visual con los tres periodistas que asistieron a la conferencia e interactuó poco con su abogado. Luego de transcurridos unos diez minutos la audiencia concluyó.
De llegarse a un acuerdo de cooperación, es improbable que el testimonio de Soto García impacte el curso del caso de los sobrinos Flores, quienes ya fueron sentenciados a 18 años de prisión y esperan por la respuesta de la Corte de Apelaciones del Segundo Circuito.
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