WASHINGTON — El presidente Donald Trump dijo el lunes que estaría dispuesto a invocar la Ley de Insurrección, que permite al presidente de Estados Unidos desplegar tropas federales para sofocar una rebelión, en caso de ser necesario bajo circunstancias específicas.
"Tenemos una ley de insurrección por una razón. Si tuviera que aplicarla, lo haría", dijo Trump a los periodistas en el Despacho Oval. La declaración se produce luego de que los estados liderados por demócratas de Illinois y Oregón emprendieron acciones legales para bloquear el despliegue de la Guardia Nacional que ordenó el republicano.
"Si la gente estuviera siendo asesinada y los tribunales nos detuvieran, o los gobernadores o alcaldes nos detuvieran, claro que lo haría", agregó durante sus declaraciones a los periodistas en el Despacho Oval.
Trump calificó a Chicago y Portland como "zonas de guerra" el domingo y así autorizó el despliegue de soldados en contra de la administración demócrata del estado y pese a dos decisiones de una jueza federal.
Las autoridades demócratas han permitido y estimulado con sus discursos los ataques contra ICE y las autoridades policiales. Se oponen a la política del republicano en materia de inmigración.
Despliegue de la Guardia Nacional
Trump autorizó el sábado el despliegue de 300 soldados de la Guardia Nacional en Chicago, la tercera ciudad más grande de Estados Unidos, a pesar del rechazo de los cargos locales, entre ellos el gobernador del estado de Illinois, cuya capital es Chicago, J.B. Pritzker.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, defendió el domingo la medida, afirmando en Fox News que Chicago es "una zona de guerra".
"Portland (Oregon, noroeste) está en llamas. Hay insurrectos por todas partes", dijo el domingo ante las imágenes que circulan por todas las redes sociales.
Mike Johnson, presidente republicano de la Cámara de Representantes, en pleno respaldo al Presidente, dijo en una entrevista que las tropas de la Guardia Nacional desplegadas en Washington habían acudido también a una "zona de guerra, literalmente".
La jueza federal Karin J. Immergut bloqueó temporalmente en dos ocasiones, el sábado y el domingo, el despliegue militar, afirmando que no había "insurrección en Portland ni amenaza para la seguridad nacional".
Uno de los asesores clave de Trump, Stephen Miller, calificó la orden de la jueza de "insurrección legal".
Tiroteos, ataques e incendios en Chicago
Además del despliegue de tropas, la ofensiva de Trump está siendo liderada por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), una agencia que crece rápidamente tanto en personal como en funciones.
El sábado, en Chicago, un agente federal disparó a un automovilista que estaba armado y embistió a una de sus patrullas. En Texas han ocurrido en los últimos meses cuatro ataques contra agentes y centros de detención de ICE.
El plan de los demócratas y grupos como Antifa es hacer parecer que el tema es la inmigración.
El 12 de septiembre agentes del ICE tuvieron que disparar a Silverio Villegas González, un inmigrante de 38 años que huyó de un control de tránsito y embestió con su vehículo a una patrulla.
FUENTE: Con informaciòn de AFP