MIAMI.- SERGIO OTÁLORA/ DLA
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@sergiootalora
MIAMI.- Según Alliegro, esa sería la razón por la cual Rivera aún sigue libre, a pesar de que ya fue señalado, por el propio juez que la condenó, como el “coconspirador” que supuestamente habría armado toda la operación que financió al candidato fantasma Justin Lamar Sternad
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Ana Sol Alliegro, la exconsultora republicana que fue condenada por participar en el financiamiento ilegal de una campaña electoral en 2012, supone que el excongresista David Rivera podría estar colaborando con las autoridades.
Según Alliegro, esa sería la razón por la cual Rivera aún sigue libre, a pesar de que ya fue señalado, por el propio juez que la condenó, como el “coconspirador” que supuestamente habría armado toda la operación que financió al candidato fantasma Justin Lamar Sternad.
Lamar Sternad, contador de profesión y sin antecedentes en cargos públicos, se inscribió como aspirante a las primarias demócratas, para competir contra Joe García. La idea era dividir el voto de ese partido y así evitar que García se convirtiera en el oponente de Rivera que aspiraba a la reelección por el distrito 26.
“Tal vez [Rivera] haya estado cooperando mientras yo estaba en el sistema judicial”, afirmó Alliegro en entrevista con DIARIO LAS AMÉRICAS. “No sé, no tengo evidencia, pero todos los abogados con los que he hablado, y los periodistas, dijeron que [el excongresista] estaba cooperando con el FBI. [Rivera] escogió mi caso para cooperar, para comprar más tiempo [a su favor], y convertirme a mí en su chivo expiatorio”, analizó.
El tiempo pasa
El próximo 10 de marzo, Alliegro cumplirá el término de su arresto domiciliario. El pasado 18 de diciembre, fue citada a declarar ante un gran jurado (jurado de instrucción criminal) sobre el caso de Rivera.
“El fiscal tenía documentos que corroboraban lo que yo dije”, explicó Alliegro. “Su nombre [el de Rivera] fue mencionado. Ese mismo día de mi declaración, lo habrían podido haber acusado de manera formal, pero no lo hicieron”, añadió.
Según ella, el fiscal del caso, Tom Mulvihill, dijo que debía dejarse pasar las fiestas de fin de año para cualquier decisión, pero ve que el tiempo pasa y no hay ninguna decisión.
Los miembros de un gran jurado se nombran para que funjan durante un plazo de seis meses. El fiscal (en este caso Mudvihill) debe ser quien ordena a dicho jurado tomar una decisión para acusar a alguien cuando hay evidencias suficientes.
“Si el gran jurado [ante el que declaró Alliegro] termina su periodo en febrero o en marzo, el próximo que nombren no habrá escuchado el testimonio de Alliegro y tendría que repetirse todo el proceso. Ahí es donde se podrá ver si hay manipulación del sistema por parte del fiscal”, advirtió el abogado Lorenzo Palomares, que representa a Alliegro.
A tiempo
En caso de que hubiese pruebas suficientes para encausar a Rivera, el plazo de las autoridades para proceder estaría vigente durante cinco años, es decir hasta el 2017. “Qué hará la fiscalía, no lo sabemos”, acotó Palomares.
Alliegro insistió en que “el fiscal Mudvihill tiene una cantidad inmensa de información”.
“Si le diera la gana, [el fiscal] ahora mismo podría ir por Rivera. A lo mejor podrían tener una acusación sellada”, apuntó.
Sin embargo, a pesar de que según la trayectoria del caso, Alliegro se ha visto afectada por el proceder de Rivera, la exconsultora admite que ha hablado con él y ella le ha aconsejado que “se busque un abogado”.
“Traté de buscarle ayuda, he hecho todo lo que he podido, le di más que suficiente tiempo para que asumiera su responsabilidad, nunca lo hizo, no lo va a hacer. Lo único que puede pensar es que [se sienta confiado porque] está cooperando o simplemente, es un sociópata”.
Otro detalle interesante en el devenir de este proceso es que, según Alliegro, Rivera sigue insistiendo en que se va a postular como representante para el escaño estatal 119.
“La fiscalía toma eso en cuenta, no le gusta arrestar a alguien que se esté postulado. A lo mejor eso es parte de su plan, postularse y postularse para que no lo vengan a buscar. La última conversación que tuve con él fue hace dos semanas, le hice algunas preguntas, me dio unas respuestas. Le pedí que no se volviera a comunicar más conmigo, se lo dije por escrito. Y me di cuenta de que yo no puedo lidiar con la situación de David”.
“Es un hecho, [Rivera] nunca asumió ninguna responsabilidad, denunció Alliegro. El político está por encima de la ley y la persona común tiene que cargar con las consecuencias”, denunció.