MIAMI.- La jornada electoral programada para este martes comenzó a las 7:00 de la mañana en Miami, Hialeah y Miami Beach, en una segunda vuelta o runoff que debe definir la dirección administrativa y legislativa local por los próximos cuatro años en estas municipalidades de Miami-Dade.
El escenario político se encuentra marcado por una profunda polarización ideológica y tensiones legales. Por ejemplo, en Miami la aprobación de límites de mandato retroactivos desencadenó litigios constitucionales que ponen un manto de duda sobre la elegibilidad de candidatos veteranos, lo que a su vez crea una atmósfera de incertidumbre jurídica.
De forma simultánea, en Miami Beach y Hialeah, se observan confrontaciones entre el liderazgo tradicional y nuevas facciones emergentes, caracterizadas por debates sobre ética personal, pasado familiar y un llamado a la renovación generacional.
Disputas en Miami
La capital económica del condado enfrenta una elección en dos frentes: la titularidad del ejecutivo municipal y la composición de su cuerpo legislativo bajo la sombra de nuevas restricciones constitucionales.
La contienda para suceder al alcalde Francis Suárez decantó en un enfrentamiento entre dos visiones de gobernanza opuestas, representadas por Eileen Higgins y Emilio González, después de que ninguno de los trece candidatos alcanzó el umbral del 50% más uno de los votos.
Higgins, excomisionada de Miami-Dade, emergió como triunfadora en la primera vuelta con casi el 36% de los sufragios. Su campaña se caracteriza por un enfoque en la tecnocracia progresista y la gestión de servicios, alineada con el Partido Demócrata.
Por su parte, González, exadministrador de la Ciudad de Miami y coronel retirado, obtuvo cerca del 19.5% de los votos, lo que le permitió asegurar su lugar en la segunda vuelta por un margen estrecho.
Según expertos, los resultados de la segunda vuelta dependerán de la captación de votantes indecisos. Higgins parte con una ventaja numérica significativa, pero el voto conservador estaba altamente fragmentado en la primera vuelta. Si González logra consolidar esos bloques bajo la bandera republicana, la contienda podría tomar un rumbo distinto.
Entretanto, la silla del Distrito 3 de Miami se la disputan Frank Carollo, excomisionado que busca recuperar su antiguo escaño, y el empresario Rolando Escalona, quien se presenta como un outsider de la política.
Renovación en Hialeah
Hialeah presenta un escenario particular puesto que la alcaldía ya fue resuelta. Bryan Calvo, de 27 años, ganó la silla edilicia en la primera vuelta.
Por tanto, la elección de este martes se limita exclusivamente a definir la composición del Concejo municipal en los Grupos III y IV, para determinar si el nuevo alcalde tendrá una legislatura aliada u hostil.
En el Grupo III, la carrera enfrenta a Gelien Pérez y Jessica Castillo. En el Grupo IV, la vacante se disputa entre dos candidatos que prometen modernización: William Marrero y Javier Morejón.
Polarización en Miami Beach
La contienda por el Grupo I de la Comisión de Miami Beach es una de las más volátiles y controversiales.
Monica Matteo-Salinas se posiciona como la candidata de la competencia administrativa, con experiencia como asistente legislativa y el respaldo del bloque progresista y de defensa de derechos civiles. Su argumento central es la capacidad operativa inmediata.
Frente a ella, Monique Pardo Pope, abogada de familia, aglutina el voto conservador y religioso, con el respaldo de organizaciones que buscan paridad de fondos para escuelas religiosas y seguridad.
Logística electoral
El éxito de la jornada depende de una infraestructura logística ya revisada. La fecha límite para el registro de votantes concluyó en noviembre y el plazo para solicitar boleta por correo también expiró.
Es crucial recordar que la devolución de la boleta por correo debe realizarse físicamente en la Oficina del Supervisor de Elecciones antes de las 7:00 de la noche del día de hoyr martes. Las boletas que lleguen tarde no serán contadas, sin importar el matasellos, según la autoridad electoral.
Ahora, la última palabra la tienen los electores.