MIAMI.- La Junta Escolar de Miami-Dade reafirmó, de manera unánime, su oposición a que haya maestros armados en las escuelas públicas de Miami-Dade.
MIAMI.- La Junta Escolar de Miami-Dade reafirmó, de manera unánime, su oposición a que haya maestros armados en las escuelas públicas de Miami-Dade.
Sin embargo, desde que la idea ha estado en la discusión pública, antes y después de la masacre de Parkland, tanto los miembros de la junta escolar como el superintendente, Alberto Carvalho, han insistido en que el Condado, a diferencia de otros de la Florida, no tiene necesidad de armar a sus maestros, porque cuenta con una policía especial que cuida cada una de las 350 escuelas públicas de Miami-Dade.
La declaración de la junta fue por acción propuesta por Steve Gallón, quien representa en la junta al distrito 1.
Hasta la fecha hay en servicio 150 nuevos policías, pero les queda por contratar otros 140.
De acuerdo con la ley aprobada en la pasada sesión legislativa del parlamento en Tallahassee, son las juntas escolares las que deciden si se acogen a programa de guardianes escolares.
Dicho programa fue ampliado a todos los maestros y empleados escolares que quieran recibir entrenamiento militar con el fin de poder tener un arma dentro de los establecimientos escolares.
Tendrán que someterse a una revisión de antecedentes, a exámenes psicológicos y a varias horas de práctica de tiro y manejo de armas.
Los entrenamientos serán tan estrictos, según se dijo, como los de la policía.
Las organizaciones de padres de familias, los sindicados de maestros, la mayoría de alguaciles de los condados de Florida, se opusieron a esa medida.
El Departamento de Policía del Condado Miami Dade también expresó su rechazo.
La secundaria Marjory Stoneman Douglas, donde sucedió la masacre que dejó 17 muertos, tenía un agente del alguacil del condado Broward asignado a la seguridad del centro educativo.
Pero como lo demostraron las investigaciones posteriores, este oficial no actuó para detener al atacante.