MIAMI.-JOSÉ PERNALETE
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@jpernalete
La antigua mansión del famoso capo colombiano desaparecerá en pocas horas, sin embargo las historias del lugar perdurarán en el tiempo
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Las puertas de la propiedad ubicada en 5860 de North Bay Road, en Miami Beach, están llenas de anécdotas que sólo pueden imaginar quienes entran a conocer la antigua casa del capo colombiano de la droga, Pablo Escobar.
Al inmueble le quedan sólo horas pues su actual propietario, Christian de Berdouaré, ha decidido demolerla el lunes 18 de enero.
Este empresario francoitaliano conversó con DIARIO LAS AMÉRICAS y no dudó en afirmar que “si algo tenía Pablo Escobar, era el buen gusto en escoger la mejor ubicación para esta casa”.
Los documentos que muestra Berdouaré indican que Pablo Escobar compró esta casa el 20 de marzo de 1980, información incluso contenida en record público del Condado Miami-Dade, “pienso que pagó unos 800.000 dólares”.
Posteriormente, el Gobierno de Estados Unidos confiscó la propiedad en 1987.
“Yo se la compré a una familia que le había adquirido la mansión al Gobierno […]. La adquirí en mayo de 2014 por la vista que tiene de la bahía, desde acá se puede ver el downtown de Miami también, la vista es espectacular”, apuntó.
El inversionista confesó que no le sorprendió que la casa perteneciera a quien fue uno de los hombres más buscados del mundo.
Condición actual
Cuando se convirtió en su propiedad, recuerda que la estructura se encontraba en las mismas condiciones actuales. Cuenta con cuatro habitaciones y en la mayoría de las paredes y techos hay perforaciones, supuestamente hechas por gente que trataba de encontrar alguna parte del tesoro de Escobar.
“Desconozco si consiguieron algo, obviamente nunca me han dicho nada”, relató y añadió que cree que existe un tesoro en la vivienda.
De hecho, teme que durante el derribo de la mansión, cerca de la piscina, sea posible descubrir sorpresas. “No sólo alguna bolsa de dinero u otras cosas, me han dicho que hasta podemos encontrar cadáveres enterrados”, mencionó.
Entre los especialistas que trabajan con este constructor, hay expertos en detección de metales, y peritos que revisarán por cuadrantes cada rincón del terreno.
El testimonio
Christian de Berdouaré es el dueño de una cadena de restoranes de pollos en brazas. Vive en Estados Unidos desde 1985 y además de esta residencia, cuenta con otras dos propiedades en la exclusiva zona.
“Cuando adquirimos esta casa no sabía a quién le pertenecía antes, después de comprarla nos dimos cuenta que era algo más interesante de lo que aparentaba, pues muchos medios de comunicación de Estados Unidos, Europa e incluso de Medio Oriente me pidieron entrevistas. Todos estaban muy interesados en la historia criminal de ese narcotraficante”, declaró.
Aseguró que Pablo Escobar sí llegó a vivir en la millonaria residencia.
“No dudo de que la usaron para sus actividades por el gran muelle que tiene, de hecho, todos los vecinos me han dicho que en ese tiempo había mucha actividad durante la noche: Yo pienso que en esas horas se realizaban los contrabandos de drogas”, afirmó.
Explicó que la decisión de derrumbar la emblemática propiedad obedece a la situación en la que se encuentra “Es un desastre, está llena de grafitis y huecos, nos dimos cuenta que salvarla era mucho trabajo. Además, nunca he querido vivir en la casa de un criminal”.
Relató que compró la propiedad por 9.7 millones de dólares. El costo de derrumbarla está previsto en unos 30.000 dólares.
Luego quiere construir una residencia “más contemporánea, para mí y mi familia, o simplemente venderla”.
Derribar esta estructura también se ha convertido en una posible inversión. Junto a un equipo de productores de televisión y cine realizan en cuenta regresiva la grabación de un documental en la casa antes de que se convierta en ruinas.
Su esposa fue periodista de una cadena local de noticias y encabeza la operación de producción.
Durante la realización del reportaje, se desplegaron equipos de luces, sistemas de grabación de sonido, cámaras de video de alta definición para el rodaje, que aún no tiene fecha de transmisión. Incluso, llamó la atención que colocaran fusiles y armas de alto calibre en la entrada del inmueble y la sala para realzar el ambiente durante las grabaciones.
“Queremos hacer un documental que muestre parte de la vida de Pablo Escobar que casi nadie conoce”, mencionó.
Los documentos de compra por parte de Escobar demuestran que adquirió el inmueble a su nombre. “No lo hizo a nombre de una empresa, eso es algo muy extraño, que un narcotraficante compre algo en su nombre […] En ese momento no tenía un sistema de lavado de dinero y pagó en efectivo”.
Berdouaré no descarta que el hecho de que en ese terreno se encontrara la casa de Pablo Escobar, en términos de futuro, pueda conviertir la nueva propiedad en una opción con mayores ganancias.
“Confío en que les gustará más lo que vamos a construir y algunos no querrán saber nada de la energía de ese capo”.
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