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MIAMI.- El plan relacionado con la extensión de la autopista 836 o Dolphin Expressway hasta el sector de Kendall, en el oeste de Miami-Dade, que un comité de la Comisión del Condado desaprobó el mes pasado, podría encontrar el salvavidas que lo saque a flote de la mano del comisionado por el distrito 11 Joe Martínez.
El legislador de origen cubano, que es un acérrimo defensor de la propuesta, dijo a DIARIO LAS AMÉRICAS que insistirá frente a sus cuatro compañeros del Comité de Operaciones Gubernamentales (GOC) para lograr la viabilidad de la iniciativa o de lo contrario propondrá que ésta sea analizada y debatida en el pleno de la Comisión.
Martínez considera que un plan de “tan alta envergadura”, impulsado por la Autoridad de Autopistas de Miami-Dade (MDX), no puede ser decidido por un comité “tan pequeño”, del que forma parte junto con los también comisionados condales Xavier Suárez, Rebeca Sosa, Jean Monestime y Dennis Moss.
La solicitud de Martínez será presentada el próximo 11 de julio cuando debe reunirse nuevamente el GOC, comité que el pasado martes 13 de junio rechazó la propuesta con tres votos en contra emitidos por Suárez, Sosa y Monestime frente a dos favorables de Martínez y Moss.
La iniciativa del MDX, tal como fue presentada en la reunión del GOC, establece un ensanche de la autopista partiendo de la avenida 137 del suroeste, que es donde actualmente termina, luego se extendería hasta la Calle Ocho, de allí “correría” por dentro del canal lateral de esa arteria hasta la avenida 167 y a partir de ese punto, en sentido sur, el trazado iría a desembocar en la calle 136 en inmediaciones del Tamiami Airport.
Como están las cosas, la propuesta encontró un marcado rechazo entre algunos activistas y vecinos del condado que fueron escuchados en la sesión del GOC, bajo el argumento de que el trayecto de la extensión de esa arteria vial, calculado en unas 15 millas, impactaría una amplia zona que está por fuera de la línea urbana, en donde existen humedales que conforman el “frágil” ecosistema de los Everglades.
“El problema primordial es la ampliación de la línea urbana, pero ese no es el caso. Solo se está pidiendo el permiso para hacer una infraestructura que es muy necesaria, no solo para las personas de nuestro distrito, sino para todas las personas que viajan hacia el este del condado”, subrayó Martínez.
Pero, también, el legislador condal identifica el denominado Smart Plan, megaproyecto que involucra seis corredores de transito rápido, ya sea con autobuses expresos, extensión del Metrorail, uso de otros trenes con vías existentes o trenes ligeros, como uno de “los grandes enemigos” de la prolongación del Dolphin Expressway.
“Yo fui el primero que hice la propuesta del Smart Plan, en el 2002, la reviví en el 2012, pero los tiempos cambian; ya esa no es la tecnología del futuro; tampoco hay suficiente dinero no solo para construirlo sino para luego operarlo y mantenerlo. Hay muchas personas que creen que la propuesta de extender la 836 podría robarle recursos a ese plan”, aseveró.
Caos vehicular en Kendall
La justificación de Martínez para insistir en la aprobación de la propuesta de MDX se centra en el creciente caos vehicular que se registra, especialmente en horas pico, en las principales calles del área de Kendall.
Un conductor que sale de la avenida 162 y se dirige por la calle 88 rumbo a la autopista Turnpike puede tardar hasta 50 minutos para lograr su propósito, según un estudio de la Universidad Internacional de la Florida (FIU).
A juicio del comisionado del distrito 11, “seguiremos embotellados en Kendall si no se extiende la 836. Hay gente que le gusta vivir en el oeste o que simplemente no puede vivir en Brickell o en La Playa, porque no tienen suficientes ingresos para hacerlo”.
En tal sentido, en la reunión del GOC de junio pasado se escucharon voces de residentes que dijeron que si alguien no puede vivir en Kendall, por el problema del “embotellamiento”, la mejor opción sería mudarse a otros sectores del condado. “Eso es algo absurdo”, señaló Martínez.
“El problema del tráfico no solo afecta a Kendall, también hay otras personas que vienen del sur del condado y que deben tomar la Kendall Drive, Sunset Drive, Miller, Bird Road, Coral Way o la Calle 8, y si una persona vive en esta zona sabe que el tráfico se pone infernal”, sostuvo.
Bondades de la propuesta
Acorde con Martínez, la propuesta de MDX presenta una serie de bondades que no solo permiten un alivio en materia de flujo vehicular en un vasto segmento del sector de Kendall, sino también la posibilidad de brindarles a los residentes del oeste de Miami-Dade otras alternativas de movilidad.
La iniciativa contempla la entrada en servicio de nuevas rutas de autobuses expresos que serían manejadas por el sector privado en procura de que no se conviertan en una “posible carga futura” para el sistema de transporte público del condado.
Según la propuesta, serían autobuses con silletería de lujo, baños, internet wi-fi y otras características especiales que después de recoger pasajeros, en paradas por determinar, se incorporarían en la extensión de la 836 en una “línea express” que podría terminar en el downtown de Miami.
Al respecto, Martínez explicó: “Las personas que no quieran usar sus carros van a tener la posibilidad de dejarlo en un parqueo, montarse en un autobús, como los de Greyhound, y seguir su rumbo hacia el este en un tiempo muy rápido”.
Otra alternativa que abre la propuesta es la construcción de un “área de tecnología” en proximidades del Tamiami Aiport, que hasta el momento no ha podido desarrollarse por la falta de vías de transporte.
“Podríamos hacer un área de tecnología para invitar a compañías a que se relocalicen en esa zona en la que no ha podido realizarse ningún proyecto, porque la única entrada al aeropuerto está por la avenida 137”.
Y agregó: “Lo que estaba hablado entre MDX y el Tamiami Airport era construir un puente desde la parte final de la extensión de la 836 hasta predios de esa terminal, y así conectarlo con el resto del condado por una vía rápida teniendo en cuenta que Miami es una ciudad con un comercio muy amplio”.
Sosa: “Es conveniente, pero no así”
Al ser consultada por DIARIO LAS AMÉRICAS en torno a su voto negativo por la propuesta de MDX, la comisionada Rebeca Sosa dijo que no se opone a la extensión de esa autopista hacia predios del área de Kendall, “siempre y cuando no vaya más allá de la línea urbana”.
Sosa estima que el estudio de MDX debe enfocarse sobre la parte que se encuentra “atascada” y no pretender la construcción de un tramo de carretera a través de una zona que está por fuera de la línea urbana o “límite de desarrollo urbano (UDB)”, que puede despertar el interés de personas y compañías por comprar tierras en esa parte del oeste del condado.
La legisladora de ascendencia cubana considera que la posible obra podría prestarse para que la gente empiece a comprar tierras fuera de la línea urbana, por razones de precio, “para decir en el futuro que quieren construir ahí”.
Dijo que como miembro del GOC no se opondría a que la eventual extensión de la autopista “toque un poco” algunos terrenos que se salen de la línea urbana, en caso de que el trazado utilizara la avenida 157 del suroeste.
Finalmente aseguró que MDX puede volver a la mesa del comité, “pero con ciertas modificaciones”, y citó como ejemplo, “un estudio donde ellos cubran más la parte urbana donde la gente tiene sus casas y sus negocios”.