MIAMI.- Un comité del Congreso estatal de la Florida ha aprobado pasar a discusión la propuesta de ley que permitiría a los maestros ofrecerse como voluntarios para portar armas de fuego durante las clases, si las juntas escolares locales lo aprueban.
La propuesta adoptada, si es finalmente aprobada, enmendaría la ley de protección a las escuelas públicas, que fue adoptada el año pasado, tras la masacre del instituto Marjory Stoneman Douglas High School, en Parkland, en el que 14 alumnos y tres profesores fueron asesinados.
La proposición de ley “no requiere” que los maestros porten armas, que serían utilizadas en caso de peligro inminente, sino que “permite” a los maestros ofrecerse a portarlas, luego de cumplir un entrenamiento de 114 horas, además de poseer el requerido permiso de porte y pasar un examen psicológico y otro de drogas.
Quienes proponen esta enmienda plantean que “hará a las escuelas más seguras”, pero quienes se oponen, incluyendo el sindicato de maestros, replican que “los educadores no deben hacer el trabajo de guardias de seguridad”
Estadísticas
La posesión de armas de fuego en la Florida continúa aumentando, ya sea a través de la obtención de permisos y la compra en los más de 2.390 locales habilitados para la venta, así como la adquisición ilegal a través de varias vías.
Según las estadísticas publicadas por la organización internacional Gun Policy, cerca de 1,3 millones de personas en la Florida poseen algún tipo de arma de fuego con o sin permiso, lo que equivale al 6,5% de la población, estimada en 20,6 millones de residentes, según la última actualización del censo, el año pasado.
Los resultados revelados por las firmas encuestadoras varían según las circunstancias del momento. Por ejemplo, la afamada Gallup, que condujo hace apenas un mes una encuesta en todo el país, cuando no acontecía un tiroteo que ocupara las noticias en los periódicos, asegura que el 55% de la población favoreció un control mayor. Mientras tanto, otro estudio, que tuvo lugar a raíz de la masacre de Orlando en 2017, en donde 49 personas resultaron muertas y 50 más heridas, resultó que cerca del 70% de los consultados reclamó aumentar las restricciones y penalidades.
Entre tanto, legisladores republicanos y demócratas continúan abogando por disminuir o aumentar indistintamente las regulaciones existentes, al mismo tiempo que los promotores de la National Rifle Association (NRA) apelan al derecho constitucional de portar armas, ante el creciente debate que cuestiona la vigencia de una legalidad que fue establecida en 1791.
FUENTE: REDACCIÓN