MIAMI.- Power Couture, la muestra vanguardista de arte contemporáneo inaugurada en la galería Pan American Art Project de Miami, invita al espectador a abordar de una forma audaz los vínculos existentes entre los cánones del vestir y el poder político.
“Espero que suscite algo de debate, que el espectador cuestione las fronteras de la política, no solo en Cuba o en Miami, sino en cualquier parte del mundo”, afirmó a DIARIO LAS AMÉRICAS, Claudia Taboada, curadora artística de la muestra.
En una de las instalaciones se puede ver un set de corbatas multicolor, organizadas, una al lado de la otra, que simboliza la ostentación del poder, la elegancia y la solemnidad. Debajo un gran lienzo refleja el estampado de cada prenda. Al frente, un lazo de ahorcado, hecho con corbatas, cuelga del techo y sobre una silla solitaria que invita a inmolarse.
“La corbata es una prenda que usan fundamentalmente los jefes de estados, políticos, banqueros, o quienes pretenden aparentar formalidad. Es un atuendo molesto, que las personas aceptan llevar por lo que simboliza”, explicó la artista cubana residente en España Lorena Gutiérrez, participante de esta exhibición colectiva que, con esta propuesta, abre un montón de interrogantes.
También el espectador puede reflexionar con la muestra de pequeño formato llamada "Club de los Intocables".
La obra reúne en un espacio varios soldaditos de plomo de diferentes épocas, que la artista despojó de sus armas y pintó sobre sus uniformes militares modelos de distintas colecciones exclusivas de Chanel.
“Es una manera de mostrar cómo ciertas castas militares, al ostentar el poder, derivan en un estatus diferente, no accesible al público general. Por eso están todos enclaustrados para no mezclarse y distinguirse por el estatus que tienen”, explicó Gutiérrez.
“No tienen armas, porque ya están instalados en el poder. Ahora visten de Chanel, son la élite”, indicó la autora.
Otra instalación que llama a la reflexión pertenece a la artista, también cubana, Sandra Ramos. “Una de las más reconocidas en el contexto en Miami”, afirmó Taboada.
Power Couture exposición-03ba2a2aff30.jpg
El uniforme escolar de Cuba se confecciona en EEUU.
CÉSAR MENÉNDEZ DLA
En ese salón cuelgan dos cuadros de gran formato. En cada uno la protagonista es una niña, vestida de uniforme de pionera -estudiantes de la escuela primaria en Cuba-. En el primero, la pionera parece remar, en el segundo, su cuerpo reposa, pero la silueta de la niña tiene la forma del mapa de Cuba y sobre ella reza un letrero Vano Dello Infero, haciendo alusión a ese lugar vacío y oscuro, antes de llegar al infierno, descrito en la Divina Comedia de Dante Alighieri, donde las almas vagan y son castigadas por su falta de compromiso, decisión moral e inacción.
En el centro del salón, frente a los dos cuadros de las pioneras, en una cinta de aeropuerto pasan una y otra vez, unas bolsas transparentes llenas de uniformes escolares, rojos y blancos.
Ramos nos muestra una paradoja, “los uniformes que contienen los maletines, que giran en la estera del aeropuerto, son confeccionados y comprados aquí en los EEUU para ser enviados a Cuba. Ante la escasez en la isla, es el sistema capitalista quien provee y mantiene ese símbolo de la ideología del poder en Cuba”.
Power Couture-exposición 0aa6e46104d4.jpg
El público disfruta de la muestra.
CÉSAR MENÉNDEZ DLA
Power Couture, que está teniendo una gran acogida del público miamense, utiliza distintas manifestaciones artísticas para cuestionar lo establecido, creando un espacio único para que un espectador reflexivo desafíe el concepto de la moda como fenómeno de expresión, comunicación e identificación social y su relación con el poder.
[email protected]
@menendezpryce