MIAMI.-El alcalde de Miami Beach Philip Levine reiteró este martes, en una rueda de prensa celebrada en la alcaldía, que debe haber cambios significativos en la emblemática zona de Ocean Drive, en la que se concentran hoteles, restaurantes y bares, localizados enfrente de la playa.
Propuso suspender las ventas de bebidas alcohólicas desde las dos de la mañana e imponer la regulación de reducción de ruido para esa área. En la actualidad esa regulación exime a los comerciantes de Ocean Drive.
Levine hizo esa propuesta tras los incidentes violentos del fin de semana del Memorial Day, en el que se celebró, como es usual en esa fecha, el Urban Beach Week. Durante esos días Miami Beach recibe un enorme influjo de turistas, atraídos por el Hip-Hop.
El domingo un hombre murió abaleado después de una disputa por un espacio de parqueo, en la calle Sexta con la Avenida Collins. Y el lunes una persona fue atacada con un pedazo de botella, durante una riña, también en la calle sexta.
El jefe de la policía de Miami Beach, Daniel Oates, dijo que, a pesar de los dos incidentes, hubo una reducción del 50% en los arrestos, en comparación con 2016, y recalcó que los delitos en La Playa, en general, se han reducido.
También informó que en el incidente del domingo, las personas involucradas eran de Georgia. Y en el del lunes, eran residentes de La Playa.
Levine enfatizó que cuatro o cinco bares en Ocean Drive no pueden dañar la marca de la ciudad para justificar medidas más estrictas en la zona donde sucedieron los hechos violentos.
En la rueda de prensa también estuvo presente el administrador de la ciudad, Jimmy Morales.