MIAMI.- Un proyecto de resolución fue presentado en el Senado de Florida con el fin de “condenar” a tres funcionarios del condado Hillsborough, en la costa oeste floridana, quienes se reunieron con la embajadora cubana y otros funcionarios de Cuba en una cena en Tampa.
La medida, radicada como "SR 1728: Gobierno cubano tiránico", menciona a los funcionarios públicos que sostuvieron una cena con un grupo de representantes de la dictadura cubana liderados por la embajadora Lianys Torres Rivera, el 3 de marzo en un restaurante de lujo en Tampa.
La propuesta legislativa se refiere a Guido Maniscalco, miembro del Concejo Municipal de Tampa; Karen Pérez, miembro de la Junta Escolar del Condado de Hillsborough, y Cindy Stuart, secretaria del Tribunal y Contralor del Condado de Hillsborough.
Según el medio Tampa Hoy, el régimen cubano tiene un acuerdo con el Acuario de Florida para trabajar en un proyecto destinado a mejorar la salud de los arrecifes de coral. Sin embargo, cuando la embajadora y los funcionarios electos locales cenaban en un restaurante en Tampa, se produjo una protesta.
En la manifestación intervinieron activistas cubanos, a quienes les incomodó la presencia de una “agente del régimen” en Tampa, por cuanto Cuba hace parte de la lista de países que promueve el terrorismo internacional y debido al alto nivel de represión que ejerce la élite militar en el poder en contra del pueblo de la isla.
De acuerdo con el proyecto de resolución, "cuando se corrió la voz de la reunión sin precedentes, estalló una protesta en el restaurante, con manifestantes indignados que confrontaron a la embajadora y su delegación, gritándoles y exigiendo saber por qué decenas de miles de cubanos están detenidos como presos políticos por su propio gobierno en una descarada violación de las leyes de derechos humanos".
Cuba fue incluida oficialmente como patrocinador del terrorismo en enero de 2021, junto con Irán, Corea del Norte y Siria. Por lo tanto, según la iniciativa, es “inaceptable” que los funcionarios del gobierno local en cualquier lugar del estado o de los Estados Unidos se sienten a una cena de lujo con los representantes de la dictadura cubana.
Añade que el régimen de La Habana “traiciona a su propio pueblo” y se “burla de la decencia común”, en desprecio de los “principios democráticos”.
Pocos días después del incidente, dos de los activistas cubanos que protagonizaron la improvisada protesta en el restaurante donde se celebraba la reunión pidieron desde Miami a las autoridades tomar cartas en el asunto.
De hecho, líderes del exilio cubano, a través de la Asamblea de la Resistencia Cubana (ARC), solicitaron el 14 de marzo una investigación formal y la destitución de los señalados funcionarios, tras su encuentro con la representante diplomática de la dictadura castrista en Estados Unidos.