MIAMI.- Las autoridades identificaron a la madre y su hijo asesinados el viernes en el suroeste de Miami-Dade, hecho perpetrado por un hombre que posteriormente se suicidó.
La policía de Miami-Dade identificó a la mujer como Odalys Bancroft, de 43 años, su hijo Theodore Couto tenía tres años
MIAMI.- Las autoridades identificaron a la madre y su hijo asesinados el viernes en el suroeste de Miami-Dade, hecho perpetrado por un hombre que posteriormente se suicidó.
La policía de Miami-Dade identificó a la mujer como Odalys Bancroft, de 43 años, empleada del Sistema de Salud Jackson. Su hijo, Theodore Couto, tenía tres años.
El incidente tuvo lugar alrededor de las 7:30 am en la plaza comercial de Kendall West, situada en la intersección de Bird Road y la Avenida 152 del SW.
El canal de televisión Local 10 citó declaraciones de miembros de la familia de Bancroft que aseguran que la mujer estaba divorciada y recientemente tuvo un exnovio del que estaba tratando de separarse. Los familiares creen, según reporta ese medio, que habría sido el exnovio de Bancroft quien cometió el crimen.
Luis Sierra, detective de la policía de Miami-Dade, explicó en un comunicado de prensa que un sargento en servicio estaba patrullando la zona cuando escuchó los disparos. Al llegar al lugar, encontró los tres cuerpos.
Sierra relató que, al parecer, una mujer que estaba en un miniván con un niño se detuvo en el cajero automático del banco Chase. En ese momento, un hombre en una camioneta se acercó y comenzó a disparar, matando a la mujer y al niño.
Las investigaciones preliminares indican que luego el hombre se disparó a sí mismo. El presunto pistolero fue encontrado muerto en el lado del pasajero del miniván. "Todo indica que el hombre disparó contra la minivan y luego se quitó la vida", comentó Sierra.
Sierra añadió que los detectives de homicidios están investigando la relación entre las tres personas involucradas.
El Sistema de Salud Jackson informó que Bancroft se desempeñaba como directora de asuntos regulatorios en esa institución. "El Jackson es mejor debido a Odalys y a la marca indeleble que dejó en nuestra organización", dijo Carlos Migoya, presidente del Jackson, en un comunicado.
Este trágico incidente ha dejado una profunda impresión en la comunidad de Kendall West. Algunos residentes expresaron su conmoción y tristeza, ya que este tipo de violencia es inusual en esta área generalmente tranquila.