miércoles 11  de  septiembre 2024
MIAMI

Senador Marco Rubio muestra apoyo a niña cubana enferma

La oficina del senador republicano Marco Rubio aseguró al padre de la niña su disposición a ayudarle a gestionar una visa médica para que sea atendida en Miami
Diario las Américas | GRETHEL DELGADO
Por GRETHEL DELGADO

MIAMI— René Alejandro Rodríguez es un padre agradecido. Sus ruegos por ayuda para su niña enferma en Cuba han surtido efecto. René, que reside en Miami, fue contactado por la oficina del senador republicano Marco Rubio con la noticia de que le ayudarían en el difícil proceso de gestión de una visa médica para su pequeña, que tiene un tumor cerebral (craneofaringioma) y en Cuba no tendría acceso a la operación necesaria.

Para la radiocirugía, procedimiento médico que las propias entidades sanitarias de Cuba reconocen no realizar en niños, el Miami Neuroscience Center at Larkin ha proyectado un plan viable y el padre está más que dispuesto a cubrir los gastos, que suman poco más de 17.000 dólares.

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Con dos años, a Ashly María Rodríguez Liriano se le diagnosticó este raro tumor después de una tomografía. La evaluación llevó a cuatro complicadas operaciones que debilitaron a la pequeña.

Ahora, la pieza clave del asunto también encuentra un camino con la disposición del senador a colaborar en los trámites.

Como dijo René a DIARIO LAS AMÉRICAS, "cuando empiezo a publicar lo del caso de mi niña, enseguida de la oficina del senador Marco Rubio se comunicaron conmigo, que ellos me iban a ayudar en todo lo que estuviera a su alcance debido al proceso de una visa médica para que mi niña pueda ser tratada en este país".

Sobre cómo recibe esta noticia, indicó que "de verdad que estoy completamente agradecido, esto me da mucha más fuerza para segur luchando por ella. Imagínate que haya una posibilidad, y más por la parte del senador Marco Rubio, que sienta ese apoyo, que hay grandes posibilidades de que ella pueda venir para acá".

En estos momentos dijo que espera un documento "para poderlo mandar para la embajada de La Habana, en Estados Unidos y, nada, tengo grandes esperanzas de que pueda mi niña estar aquí para que se pueda operar en el hospital Larkin de Miami. Créeme que, de tantas cosas malas, estoy sintiendo algo positivo. Estoy completamente agradecido por lo que están haciendo el senador Marco Rubio, todas mis amistades, los que no son mis amistades también, todos unidos por la causa".

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Antecedentes

Como explicó René, "hace cinco meses más o menos, la niña, que siempre ha sido hiperactiva y comía de todo, empezó a perder el apetito, tenía días que estaba tranquilita, no quería comer. Gracias a Dios es muy inteligente, aprendió a hablar rápido y muchas veces le decía a mi esposa que tenía 'dolorcitos de cabecita'. La llevaban al pediatra y la observaban. Pero frecuentaban los dolores de cabeza, hasta que con una pediatra le pudimos hacer una tomografía".

Agregó que "la doctora llamó a mi esposa y le dijo 'Rosa, a la niña tuya se le está viendo algo en el cerebrito'. Mi esposa me llamó llorando para acá". René tuvo que hacer una pausa para contener el llanto. "Fue el 17 de septiembre, un viernes, no se me olvida. A esa hora fue buscar una ambulancia para La Habana, y a las 4 de la tarde apareció una ambulancia sin aire acondicionado. Para qué contarte". A partir de ahí comenzaron las operaciones.

"La niña tiene hidrocefalia, porque parece que el ducto por donde debe pasar el líquido encefálico, lo tiene tupido. A la niña hubo que operarla para ponerle un catéter, que es un drenaje para cuando se le acumule líquido. Se le puso el primer catéter, creo que se tupió, hubo que volverla a operar, abrirle la misma herida, pero cuando la abrieron, no sé qué pasó y le quedó un lado que no estaba drenando. En resumidas cuentas, a la niña hubo que abrirle la cabecita por otro lado, y volvieron a ponerle el catéter, quedó mal, se le tuvo que quitar y ponerle el catéter por otro lado. Y también por el otro lado de la barriguita. La niña tiene cuatro operaciones, tiene la cabecita que ya no saben por dónde más abrirle", contó René, que fue a verla entre el 26 de noviembre y el 10 de diciembre de 2021.

"Cuando fui a Cuba traje una memoria con el resumen médico de la niña, las radiografías, todo. Me presenté en la clínica [Miami Neuroscience Center at Larkin] y me mandaron la evaluación del médico, que sí puede ser tratada. Eso no se hace en Cuba. Hay una forma de operar a la niña en Cuba, pero con un método que, en el último caso que se hizo la operación, el muchacho perdió la vista. Es una operación muy complicada y créeme que voy a hacer lo imposible porque no quiero arriesgar la vida de mi niña. A mi niña le pasa algo y te digo que... Aquí te estoy hablando y lo hago con los ojos aguados. Yo he pasado tanto con esa chiquitica, imagínate, tres años casi sin poder verla", constató René.

No obstante, da "gracias a Dios por las amistades que valen oro, me han podido dar luz y puedo contar con ellos para lo que sea. Te estoy hablando con el corazón en la mano. Todos los días, desde que la niña empezó con todo esto, a las 10 de la noche, con los pastores Yanelis Sánchez y Alexander Jiménez, de una iglesia en Cienfuegos, hacemos una cadena de oración por la niña".

Entre las gestiones de los padres estuvo contactar al humorista Limay Blanco en Cuba, "que ha hecho una plataforma para ayudar a las personas, y también los mismos médicos nos han dado la opción de un caso parecido, que pudieron lograr la operación de un familiar en Italia".

"Lo más grande"

Ante la pregunta de cómo es su hija, René se mostró orgulloso. "Eso es lo más grande", dijo. "Mi niña se sabe todos los colores, las figuras geométricas, sabe contar una pila de números, hasta el 10 por ahí pa' allá. Es increíble. Tú la ves y parece que no tiene nada. Ha perdido un poco el apetito, nada más. Estoy en videollamada con ella y cuando va a comer, dejo lo que estoy haciendo y me pongo a hacer como que estoy comiendo, le digo 'te voy a ganar, titi', y esto y aquello", sumó.

Asimismo, recordó el temple de su esposa en todo este proceso: "Mi esposa es madre, padre, maestra, gracias a Dios por esa muchacha".

Usted puede comunicarse con René al 786-447-2076.

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