Ver una mosca rondando un plato de comida o flotando en la sopa es sinónimo de asquerosidad. Es conocido por todos que estos insectos son insalubres y transmisores de múltiples enfermedades, lo que hasta ahora era un misterio es cuántos microbios pueden estar alojados en tan diminuto anila,.
Un grupo de científicos halló que tanto la mosca doméstica como el moscardón, dos de los tipos más comunes, pueden contener más de 300 bacterias distintas.
En un análisis de ADN que publicó la revistam Scientific Reports, se detalla que la mayoría de los microbios encontrados pueden ser transmisores de infecciones intestinales, sepsis y neumonía.
"La gente tenía cierta noción de que hay patógenos que pueden ser transportados por las moscas, pero no se conocía hasta qué punto esto es cierto o el alcance en que ocurre esta transferencia", comentó profesor Donald Bryant, de la Universidad Estatal de Pensilvania, uno de los autores del estudio.
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FUENTE: REDACCIÓN
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