"Kiev se mantiene fuerte, orgullosa, de pie y, lo que es más importante, libre", añadió Biden, afirmando que el presidente ruso Vladimir Putin se creía "duro" pero topó con la "voluntad de hierro" de Estados Unidos.
Biden, que el lunes efectuó una visita sorpresa a Kiev, negó además que las potencias occidentales planeen atacar a Rusia.
"Occidente no está conspirando para atacar a Rusia, como ha dicho hoy [martes] Putin. Millones de ciudadanos rusos que solo quieren vivir en paz con sus vecinos no son el enemigo", afirmó.
Putin acusó a los países occidentales de "atizar" el conflicto en Ucrania y anunció la suspensión de la participación del país en el tratado de desarme nuclear Nuevo START, que firmó con Estados Unidos.
Sin embargo, unas horas después, el ministerio ruso de Relaciones Exteriores aseguró que el país seguiría acatando los límites que impone al tratado hasta que este expire en 2026.
El gobernador de Florida Ron DeSantis criticó este lunes al presidente Joe Biden, a quien acusó de "descuidar" los problemas internos del país mientras viaja a Ucrania y se preocupa por la situación en ese país, inmerso en guerra desde hace ya casi un año.
Biden aprovechó este lunes para, en el marco de un viaje a Polonia, desplazarse a Kiev para reunirse con su homólogo ucraniano, Volodimir Zelesnki, en un encuentro en el que remarcó su compromiso de su gobierno con Ucrania y anunció otros 500 millones de dólares de ayuda adicional a los 50.000 ya otorgados—, que incluiría proyectiles para lanzadores de obuses, misiles antitanque, radares de vigilancia aérea y otra asistencia, pero no nuevas armas avanzadas.
Ucrania también ha pedido sistemas que permitan a sus fuerzas alcanzar objetivos rusos que se han alejado de las zonas del frente, fuera del alcance de los misiles HIMARS ya proporcionados. Zelenski dijo que había hablado con Biden sobre “armas de largo alcance y las armas que aún podrían entregarse a Ucrania, aunque no se hayan suministrado antes”, pero no detalló nuevos compromisos.
“Nuestras negociaciones fueron muy fructíferas”, añadió Zelenski.
La misión de Biden con su visita a Kiev, antes de un viaje anunciado a Varsovia, era subrayar que Washington está dispuesto a mantenerse junto a Ucrania “todo el tiempo que haga falta” para repeler a las fuerzas rusas, aunque los sondeos de opinión pública apuntan a que el apoyo en Occidente a proporcionar armamento y ayuda económica directa empieza a reducirse. Para Zelenski, el simbolismo de tener a un presidente estadounidense a su lado en tierra ucraniana poco antes del aniversario no era un detalle menor, mientras insistía a sus aliados en Estados Unidos y Europa para que proporcionen más armamento avanzado y aumenten el ritmo de las entregas.
“Me pareció que era crucial que no hubiera ninguna duda, ninguna en absoluto, sobre el apoyo estadounidense a Ucrania en la guerra”, dijo Biden.
El viaje también supuso un desafío al presidente de Rusia, Vladímir Putin, que esperaba que su ejército tomara Kiev en cuestión de días. Biden recordó haber hablado con Zelenski la noche de la invasión y dijo que “esa oscura noche hace un año, el mundo se preparaba literalmente para la caída de Kiev. Quizá incluso para el final de Ucrania”.
Un año más tarde, la capital ucraniana sigue bajo firme control ucraniano y algo parecido a la normalidad ha regresado a la ciudad conforme los combates se concentraban en el este del país, pese a los ataques con drones y misiles de crucero contra infraestructura civil y militar.
Biden advirtió que la “guerra brutal e injusta” está lejos de haberse ganado. “El coste que ha tenido que pagar Ucrania ha sido extraordinariamente alto. Y los sacrificios han sido demasiado grandes”, dijo Biden. “Sabemos que habrá días y semanas y años muy difíciles por delante. Pero el objetivo de Rusia era borrar Ucrania del mapa. La guerra de conquista de Putin está fracasando”.
“Él cuenta con que no nos mantengamos unidos”, dijo Biden sobre el mandatario ruso. “Él pensaba que podía aguantar más que nosotros. No creo que piense eso ahora mismo. Dios sabe en qué piensa, pero no creo que piense eso. Pero simplemente se equivoca por completo. Se equivoca por completo”.
La visita de Biden a Europa del Este no es respalda por DeSantis, uno de los principales azotes del inquilino de la Casa Blanca y posible rival de cara a las presidenciales de 2024, quien aseveró que Estados Unidos tiene "mucho problemas acumulados" que el mandatario está "descuidando".
En declaraciones para Fox News, DeSantis destacó que, con su viaje a Ucrania, Biden demuestra estar más preocupado por la situación dentro de las fronteras extranjeras más que por las propias, más aún después de los incidentes con objetos sospechosos en el espacio aéreo estadounidense.
"Han llegado millones y millones de personas, y luego, por supuesto, sufrimos una humillación nacional al hacer que China volara un globo espía a través del territorio continental de Estados Unidos", recriminó DeSantis.
A estas críticas de DeSantis se le han sumado otras destacadas voces del Partido Republicano, como el representante Matt Gaetz, quien acusa a Biden de "irse a dormir la siesta" cuando la frontera estadounidense "está en crisis".
En la misma línea, la representante Marjorie Taylor Greene, afín al expresidente Donald Trump y muy crítica con Biden, reprocha al mandatario no haberse desplazado hasta East Palestine, en Ohio, escenario de un reciente desastre ambiental.
"Fue a Ucrania, una nación no perteneciente a la OTAN, cuyo líder es un actor y aparentemente ahora está al mando del Ejército de Estados Unidos en la guerra mundial", añadió Taylor Greene en su perfil de Twitter, donde aboga por impulsar un 'impeachment' contra Biden.
FUENTE: AFP/REDACCION