BERLIN.- La fiscalía alemana investiga una presunta red que pagaba a varones alemanes para que reconociesen como hijos propios a bebés de mujeres extranjeras, con el objetivo de que los menores obtuviesen la nacionalidad y las madres un permiso de residencia.
La radio pública regional "rbb" informó de que esta presunta trama repartía hasta 5.000 euros por menor -entre abogados, notarios y padres fraudulentos- y que pudo actuar hasta en 700 ocasiones sólo en el estado federado de Berlín.
Las mujeres, ya embarazadas, llegaban a Alemania con un visado de turista, según los investigadores, y los padres no tenían después ninguna obligación de sufragar la manutención del menor.
Las madres quedaban en manos de la trama y muchas, para saldar la deuda, caían en la prostitución.
La fiscalía de Berlín indicó a la emisora que se han detectado varios casos en los que un solo hombre había reconocido más de diez hijos.
Según "rbb", entre los varones que reconocían la paternidad de algún menor extranjero se ha detectado a un ultraderechista.
El secretario de Estado parlamentario del Ministerio de Interior, Ole Schröder, indicó que la cifra de casos es "elevada" y explicó que, gracias a un reciente cambio legal, se puede acusar de fraude a los varones que mientan sobre su paternidad cuando el vínculo familiar no se certifique.
Según la legislación alemana, si un ciudadano alemán reconoce a un hijo como propio, el menor recibe automáticamente la nacionalidad, mientras que el otro progenitor puede obtener un permiso de residencia.
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