El llamamiento que de ser secundado por la población rusa podría desembocar en una guerra civil, la cual representa la mayor amenaza a su liderazgo en más de dos décadas en el poder.
La ley marcial en Rusia establece la inmovilización de vehículos, que carezca de hoja de ruta, bajo multa de 5.000 rublos para los funcionarios, 30.000 rublos para los empresarios y 300.000 rublos para empresas.
Putin, ante el mayor desafío desde que llegó al poder a fines de 1999, se dirigió en tono marcial a la nación para afirmar que la rebelión del jefe de Wagner, Yevgueni Prigozhin, a quien nunca nombró explícitamente, constituía "una puñalada por la espalda" para Rusia.
"A lo que nos enfrentamos es exactamente a una traición. Una traición provocada por la ambición desmesurada y los intereses personales" de un hombre, agregó, prometiendo que esa situación tendrá su "castigo".
Respuesta de Prigozhin
El jefe de Wagner replicó inmediatamente después que el presidente ruso está "muy equivocado" al acusar de "traición" a los paramilitares.
"Somos patriotas. Nadie planea rendirse a petición del presidente, de los servicios de seguridad o de nadie", sostuvo Prigozhin, criticando por primera vez directamente al Kremlin.
En redes sociales, cundieron rumores de que Putin había abandonado Moscú, pero su portavoz, Dmitri Peskov, citado por la agencia Ria Novosti, aseguró que el presidente está "trabajando en el Kremlin".
Previamente, Prigozhin anunció la toma del cuartel general del ejército ruso en Rostov, centro neurálgico de las operaciones en Ucrania, y aseguró que controla varias instalaciones militares, "incluido el aeródromo".
Las autoridades regionales de Rostov y de Lipetsk (a unos 400 km al sur de Moscú) instaron a la población a permanecer en sus hogares.
Por la tarde, combatientes de Wagner fueron señalados en la región de Lipetsk.
Operación "antiterrorista"
En su discurso, Putin admitió que la situación en Rostov era "difícil".
El gobernador de Voronezh indicó que un depósito de carburante ardió en esa región a medio camino entre Rostov y Moscú y que el ejército estaba llevando a cabo operaciones de "combate" en el marco de una "operación antiterrorista".
En Moscú se instauró un "régimen de operación antiterrorista".
Prigozhin advirtió el viernes que cuenta con 25.000 efectivos decididos a llegar "hasta el final" y "destruir todo lo que se interponga" en su camino.
"Estamos muriendo por el pueblo ruso, que debe ser liberado de quienes bombardean a la población civil", afirmó.
"Hay que poner freno a quienes tienen responsabilidad militar en el país", insistió el jefe paramilitar, llamando a los rusos a unirse a sus tropas y a no oponer resistencia.
Para apoyar a Putin, el líder de la república rusa de Chechenia (en el Cáucaso), Ramzan Kadirov, anunció que envió a sus combatientes a las "zonas de tensión" para "preservar la unidad de Rusia".
"Con el presidente"
El presidente de la cámara baja del Parlamento ruso, Viacheslav Volidin, instó a la población a respaldar al "presidente Vladimir Putin, comandante en jefe", y su par de la cámara alta, Valentina Matvienko, recalcó que la fuerza" de Rusia reside en "la unidad" y su "intolerancia histórica a las traiciones y las provocaciones".
El patriarca Cirilo, jefe de la Iglesia ortodoxa de Rusia y aliado de Putin, llamó igualmente a la "unidad" ante los "intentos de sembrar la discordia".
Los responsables de la ocupación rusa en las regiones ucranianas de Donetsk y Lugansk (este) y de Zaporiyia y Jersón (sur) también dieron el apoyo de esos territorios a Putin.
Desde Ucrania, el presidente Volodimir Zelenski afirmó que la rebelión de la milicia de mercenarios demuestra la "evidente" debilidad de Rusia y destacó que su país está protegiendo a Europa "del mal y el caos" rusos.
Investigación
La fiscalía general rusa abrió el viernes una "investigación penal en relación con el intento de organizar un motín armado", anunció el portavoz del Kremlin.
En sus mensajes de ese día, el jefe de Wagner afirmó que sus hombres fueron bombardeados por el ejército ruso cerca de la línea de frente con Ucrania y acusó al ministro de Defensa, Serguéi Shoigu, de haber ordenado esos ataques.
Unas acusaciones que son una mera "provocación" y "no se corresponden con la realidad y son una provocación", según el Ministerio de Defensa.
Las fuerzas de seguridad rusas, el FSB, llamaron a los combatientes de Wagner a detener a su jefe y un influyente general ruso, Serguéi Surovikin, instó a los milicianos a renunciar a su revuelta.
Ojos del mundo sobre Rusia
Estados Unidos, Francia, Alemania y el Reino Unido, así como la Unión Europea (UE), indicaron que seguían de cerca la situación en Rusia.
Además, los ministros de Exteriores de las potencias del G7 "intercambiaron puntos de vista" sobre la situación en Rusia, informó el jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, abogó por una "solución pacífica" de la crisis.
Bielorrusia, aliado de Rusia, consideró que la rebelión de Wagner suponía un "regalo" para las potencias occidentales.
El empresario opositor ruso en el exilio Mijaíl Jodorkovski llamó a la población a apoyar la rebelión de Prigozhin, alegando que se debía defender "incluso al diablo" si este decide enfrentar a Putin.
Unas horas antes del estallido de esta crisis, Prigozhin apuntó que el ejército ruso se estaba "retirando" en el este y el sur de Ucrania, contradiciendo las afirmaciones del Kremlin, que asegura que la contraofensiva de Kiev está fracasando.
El ejército ruso anunció que en las últimas 24 horas repelió nueve ataques en el sur y el este de Ucrania, una información no verificada.
Líder de Wagner - AFP
Líder del grupo paramilitar ruso Wagner, Yevgueni Prigozhin, durante un video que mostraba decenas de muertos de su grupo y acusaba al Ejército de Rusia por no proporcionar municiones.
AFP
Mercenarios reciben respaldo
La rebelión iniciada por Yevgeny Prigozhin recibe el inesperado respaldo del exiliado magnate reconvertido en líder opositor Mikhail Khodorkovsky.
En una publicación en Facebook, Khodorkovsky dijo el sábado que la revuelta del propietario de Grupo Wagner es “el golpe más fuerte a la reputación de (el presidente ruso Vladímir) Putin”, y que ayudarle a llegar a Moscú sería “ayudar a nuestro país”.
Además, afirmó que Prigozhin había “repetido palabra por palabra lo que nosotros, la oposición antibélica, hemos estado diciendo desde el inicio de la guerra", que el “propósito de la guerra es el robo” y que nadie se cree el motivo oficial para el conflicto armado en Ucrania.
“¡Ayuden al diablo si decide oponerse a este régimen! Ayuden porque no hay peor delito que desatar una guerra agresiva. Si un criminal está dispuesto a interferir con otro (...) tenemos que ayudar, y luego, si fuese necesario, nos enfrentaremos a ellos", escribió Khodorkovsky.
¿Qué pasa en Ucrania?
Un asesor presidencial ucraniano afirma que el inicio de la contraofensiva de Kiev ha “desestabilizado finalmente a las élites rusas” y agravó las divisiones internas.
Mykhailo Podolyak señaló el sábado que los acontecimiento se están “desarrollando según el escenario del que venimos hablado desde hace un año", según las declaraciones publicadas por la agencia noticiosa ucraniana Interfax.
Putin prometió el sábado que defenderá a su país de la rebelión armada declarada por Yevgeny Prigozhin.
La rebelión se produce mientras las fuerzas de Kiev ponen a prueba las defensas rusas en las primeras fases de su contraodensiva.
Podolyak dijo que “el inicio de la contraofensiva ucraniana ha desestabilizado finalmente a las élites rusas, intensificando la división interna surgida tras la derrota en Ucrania".
“Hoy estamos siendo testigos del inicio de una guerra civil", añadió.
El jefe de la inteligencia militar ucraniana afirmó que el conflicto entre la cúpula militar rusa y el propietario del Grupo Wagner, Yevgeny Prigozhin, es “un choque frontal de mentiras y verdades".
En declaraciones a la televisora ucraniana el sábado, Kyrylo Budanov, señaló que el enfrentamiento se produjo porque Prigozhin, “les guste o no, dice principalmente (la) verdad", mientras que el Ministerio de Defensa de Rusia cuenta “principalmente mentiras”.
El conflicto “no es falso”, agregó.
Según Budanov, mientras los altos funcionarios de Defensa rusos hablan de avances con soldados jóvenes y valientes, Prigozhin señala los errores de cálculo, las deficiencias del equipamiento, la falta de formación y otros problemas.
“Se trata de un choque frontal de mentiras y verdades. Aunque ambos trabajan completamente en interés de la Federación Rusa, debemos recordarlo”, declaró.
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Los miembros del grupo Wagner se sientan encima de un tanque en una calle de la ciudad de Rostov-on-Don, el 24 de junio de 2023. El presidente Vladimir Putin dijo el 24 de junio de 2023 que un motín armado por parte de los mercenarios de Wagner fue una "puñalada por la espalda". y que el jefe del grupo, Yevgeny Prigozhin, había traicionado a Rusia, ya que prometió castigar a los disidentes. Prigozhin dijo que sus combatientes controlan sitios militares clave en la ciudad sureña de Rostov-on-Don.
STRINGER / AFP
Confrontación militar abierta
El Ministerio de Defensa de Gran Bretaña describió la rebelión armada de los mercenarios del Grupo Wagner como el desafío más significativo al estado ruso en los últimos tiempos.
El parte de inteligencia publicado por el ministerio el sábado afirmó que la disputa entre el grupo de Yevgeny Prigozhin y las instituciones rusas se ha convertido en una “confrontación militar abierta”.
“Es casi seguro que Wagner ocupó lugares de seguridad clave en Rostov del Don, incluyendo el cuartel general que dirige las operaciones militares rusas en Ucrania", señaló el reporte. “Otras unidades de Wagner se están desplazando hacia el norte por Voronezh Oblast, casi con toda seguridad para llegar a Moscú".
Según el informe, hay pruebas muy limitadas de combates entre las tropas del grupo mercenario y las fuerzas de seguridad rusas.
“En las próximas horas, la lealtad de las fuerzas de seguridad rusas, y en especial de la Guardia Nacional, serán clave para el desarrollo de la crisis", añadió.
Crítica situación
Un video aparecido el sábado en Telegram mostró a Yevgeny Prigozhin, propietario del ejército privado Grupo Wagner, reunido con el viceministro ruso de Defensa, Yunus-Bek Yevkurov, y con el segundo de abordo del Estado Mayor, Vladimir Alexeyev.
En la grabación, cuyo origen no pudo confirmarse de forma independiente, Prigozhin afirmaba que él y sus tropas estaban “salvando a Rusia” y exigía que las autoridades rusas cesen al ministro de Defensa, Sergei Shoigu, y al jefe del Estado Mayor, Valery Gerasimov.
“Queremos al jefe del Estado Mayor y a Shoigu”, dijo Prigozhin. “Mientras ellos estén aquí, nosotros estamos aquí, bloquearemos la ciudad de Rostov e iremos hacia Moscú".
En el video, Yevkurov y Alexeyev trataban en vano de convencer a Prigozhin para que retire sus fuerzas de Roston del Don.
Prigozhin, un multimillonario aliado del Kremlin, mantiene una larga enemistad con la cúpula militar rusa.
FUENTE: Con informacion de AP