NACIONES UNIDAS - El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, dijo el miércoles que está en “comunicación intensa” con Rusia y otros países para frenar el incremento en el hambre mundial —exacerbada por la guerra en Ucrania— permitiendo la exportación de granos almacenados en los puertos ucranianos y asegurándose de que los alimentos y fertilizantes rusos tengan acceso sin restricciones a los mercados mundiales.
Guterres expresó optimismo después de dialogar con Moscú, Ucrania, Turquía, Estados Unidos, la Unión Europea y otras naciones.
Dijo que entre Ucrania y Rusia producen casi la tercera parte del trigo y la cebada del mundo, y la mitad del aceite de girasol, además de que Rusia y su aliada, Bielorrusia, son dos de los tres principales productores de potasa, uno de los principales ingredientes para fertilizantes.
Naciones Unidas advirtió este miércoles que la crisis alimentaria, agravada por la guerra en Ucrania, podría "durar años", mientras el Banco Mundial anunció que inyectará 12.000 millones de dólares más para ayudar a los países más vulnerables.
Guterres alertó que la crisis que ha generado la invasión rusa de Ucrania y que se suma al cambio climático, la pandemia de covid-19 y las desigualdades crecientes entre países ricos y pobres, podría "durar años".
"Si no alimentamos a la gente, alimentamos los conflictos", dijo Guterres en una reunión convocada por Estados Unidos en la ONU para analizar la seguridad mundial de alimentos.
En solo dos años el número de personas que sufren inseguridad alimentaria grave se ha duplicado, "pasando de 135 millones antes de la pandemia a 276 millones", recordó.
Guterres urgió a Rusia que libere las exportaciones de cereales almacenados en los silos de los puertos de Ucrania y a Occidente que permita el acceso de los fertilizantes rusos en los mercados mundiales.
Según el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, habría 22 millones de toneladas de granos que esperan que se den las condiciones para su exportación por los puertos del sur del país que controla en su mayoría Rusia, en particular Odesa.
Aunque no son objeto de las sanciones que Occidente ha impuesto a Rusia a raíz de su invasión de Ucrania iniciada el 24 de febrero, las medidas adoptadas contra el sistema financiero ruso dificulta la compra de fertilizantes en el extranjero.
En este sentido, Guterres negocia con Rusia, Ucrania, Estados Unidos, la Unión Europea y Turquía, para liberar la exportación de cereales y de fertilizantes.
"Tengo buena esperanza pero queda todavía camino por recorrer", dijo, y apeló a la "buena voluntad" de las partes.
"No hay solución eficaz para la crisis alimentaria sin reintegrar en los mercados mundiales, pese a la guerra, la producción alimentaria de Ucrania, así como los alimentos y los fertilizantes producidos por Rusia y Bielorrusia", dijo.
El director del Programa de Alimentos Mundial (PAM), David Beasley, recordó que los gastos operativos de sus operaciones han aumentado en 71 millones de dólares solo por el incremento del combustible, los alimentos y los fletes, generados por estas crisis.
"Esto significa que alimentaremos a cuatro millones de personas menos" que antes, recordó.
FUENTE: Con información de AFP